sábado, 19 de octubre de 2013

Un día mas - Parte 2 (Ira)

Natalia se irguió. El bosque aumentaba en oscuridad con cada paso que daba. Pero esos viejos arboles, colocados de una forma que permitan dejar un hueco entre arboles... le llamaban...

SE volvió a inclinar sobre otro hueco entre dos arboles. Contemplo.

Ira...

Mario contemplaba el bello paisaje de Valdeolivas. Nuevamente sentado en el viejo tobogán  el chico obeso respiraba, intentando llenar ambos pulmones.

Que bello que eran los atardeceres en la serranía de Cuenca...

Pero por mucha belleza que contemplara, no podía evitar pensar en lo que había pasado esa misma tarde...

Estaba harto. Harto de recibir palizas constantes y de sentir miedo... Se dejo llevar por el odio acumulado en su interior y lo desato, lastimando a quienes lo golpeaban. 

Mario contemplo sus nudillos lastimados. Que calurosa sensación...

¿Que había pasado? ¿Porque reacciono así  Era cierto que estaba cansado de recibir golpes... ¿Pero la solución era propinar mas golpes?

¿¡Acaso esa era la solución!? ¿Convertirse en lo que mas odiaba?

Mario frunció el ceño.

Era la única manera... No había otra manera...

Así que eso es lo que se sentía al golpear a alguien... Dolor, adrenalina, miedo, culpa, placer...

¿O todo esto no eran mas que alucinaciones de su mente... una mente sucumbida por el odio?

Quizá... quizá esos chicos que le golpeaban solo sentían diversión y ganas de reírse un rato...

¿Eso quiere decir que estaban mas locos que Mario? ¿Golpear a alguien solo por reírse un rato?

"Quizá no lo ven así..." 

Pero Mario había sentido todo lo opuesto. Les deseo la muerte... cada golpe era la justa razón por la que lo hacia... cada golpe era justicia para el...

Mario derramo una lagrima

No quería ser eso... pero sabia que tampoco era inevitable. Lo había hecho... ¿O quizá no?

Había conseguido quitarse a sus agresores de encima. Mario estaba seguro que no le iban a incordiar mas...

Pero a la vez, se había vuelto, aun mas si cabe, en el hazmerreir del instituto. Ahora ya no lo veían como el "solitario" o "marginado" sino como un pobre idiota que se cree boxeador y golpea a un grupo de 4 chicos muy "populares".

De otro modo, estaba donde estaba. No había avanzado nada...

"¿Quien fue el idiota que dijo que haciendo frente a tus problemas, encarandolos... estos desaparecen? ¿Quien fue el idiota que dijo que cuando tocas fondo, nada te puede ir peor?"

"¿De verdad creen que el acoso es algo fácil? Perdón .. ¿DE verdad creen que la solución al acoso es algo fácil?  ¿Que la gente no hace nada por "miedo"? Puede que algunos si... pero yo... Yo ya sabia que si hacia algo al respecto, si intentaba hacerme respetar, me enfrentaba a mis agresores, les plantaba "cara"... solo iba a conseguir mas y mas odio y burla hacia mi persona..."

Mario derramo otra lagrima...

"En las estúpidas películas no muestran al típico nerd que se rebela contra el abusón de turno. Le planta cara, le propina un puñetazo y sale victorioso. No contento con ello, es ahora el abusón quien sirve y le tiene miedo..."

Mario se limpio la lagrima.

"Si esto pasa en la vida real... ¿De verdad crees que una persona se va a dejar pegar por alguien que considera "patético"? En las películas nunca se muestra lo que pasa después de la "victoria". Dudo mucho que acabe en un final feliz..."

Y eso que he tenido suerte...

Mario sintió un arrebato de ira. La misma que sintió cuando se enfrento a esos 4 chicos.

"Lo que daría por aprender a defenderme. Podría impartir un poco de justicia en el mundo. Defender a los que pasen lo mismo que yo... y darles sendas lecciones a aquellos que se creen mucho por ir en grupo o llevar un arma"

Mario grito en su interior.

"¡Basta!"

Empezó a temblar...

"Cobardes..."

Mario parpadeo.

"Echo de menos a Natalia..."

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Pero había algo que sintió en esos momentos. Después, solo, reflexiono. ¿Que había pasado? ¿De donde salio esa fuerza con la que enfrento a esos 4 chicos? ¿De donde salio esa concentración? ¿Era todo producto de la adrenalina? ¿O era algo mas...? Supo que en ese estado de ira absoluta, era mas fuerte, mas inteligente, mas frío, no dudaba y lo que era mejor... no sentía remordimiento. Paso el tiempo y busco incansablemente volver a experimentar esa situación. Le costo pero su constancia hizo que no se rindiera. Hasta que lo logro. Llevo su mente a un nuevo nivel, capaz de controlar instintos que solo salen a flote en determinados momentos. Lo había conseguido. Forzó los limites de su mente como quizá nadie lo hizo. No había nada que no pudiera controlar. Cuando se dio cuenta, estaba en ese estado de furia pura nuevamente... Pero estaba sereno. Tranquilo, relajado. Su corazón era puro... maldad pura. Le costo maquillar ese estado. Pero volvió a sorprenderse a si mismo. Cuando nadie sospechaba nada, logro controlar ese estado de furia absoluta. ¿La diferencia? Que podía alternar su fuerza, su conocimiento y su rapidez mental... a voluntad. Desde afuera, parecía un chaval obeso con problemas físicos. Pero nadie sabia de la energía que había en el fondo de su cerebro. Su genialidad hacia que nunca se cansara. En ese momento... sonrió.

Paso los años y las nuevas situaciones, los nuevos problemas hacían que su cerebro tuviera mas hambre... Quería mas... No solo forzaría la mente, si no también el cuerpo. Y cuando ambos llegaran a una armonía...

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Y lo consiguió. Con el paso de los años, llego a un control absoluto de la mente y el cuerpo. Su cerebro mandaba y su cuerpo obedecía  No fallaba. Gracias a su mejor amigo, su mentor, su "padre", su mejor amigo Dominique, llego al máximo nivel. Era inmune al cansancio, al dolor... A muchas cosas. 

Su mente crecía en potencia. No solo creció como una base de datos. También aumento en rapidez, precisión y en el juego de la probabilidad. No había situación que le sorprendiera. No había situación que le sorprendiera...

Llego a un nivel que muy pocos humanos soñarían...

Discernía patrones, razonaba increíblemente rápido... Era capaz de saber tu próximo movimiento antes de que lo realices... No podías retarlo en un duelo intelectual...
Pero quería mas... ¿Cual es el limite de nuestra mente?

El limite del cuerpo estaba claro...

¿Pero el de la mente? Eso no tenia limites

Tenia hambre, ganas de volverse mas inteligente...

El odio, la ira... seguía su curso imparable...

Fue capaz de engañar a todos, a su novia, a la novia de su mejor amigo, a su mejor amigo... 

Lo veían como un hombre tranquilo, gracioso...

Pero no sospechaban del increíble poder que tenia.

Cuantas veces fue acorralado, cuantas veces le toco defender a su novia...

Y con un pequeño gesto, fruncir el ceño, pasaba de un estado tranquilo a un estado de ira pura...

Daba igual cuantos hombres se le enfrentaran... Nunca eran suficientes...

Pero la frustración llegaba. En ese estado de ira, hacia que su cuerpo fuera casi invencible... 

¿Pero que pasaría con la mente? ¿Y si algún día alguien o algo le haría delirar, enloquecer...?

Necesitaba ser inmune a cualquier "dolor" mental...

Se obsesiono...

Su mentor no podía ayudarlo en eso...

Era hora de entrenar por su cuenta...

¿De que vale un cuerpo que parece una maquina, si tu mente puede ser vulnerable?

Rapidez y agilidad mental, inteligencia...¿De que valía eso si sus enemigos le invadían?

Y los enemigos eran: Piedad, amor, confianza, conciencia, pena...

Cuando estaba relajado, en brazos de su novia, podía darse el lujo de aflorar esos sentimientos...

Pero en el estado de ira, no debía haber ni una gota de esos 5 sentimientos...

Ni una sola gota...

Lo intento... quizá como a el mejor le parecía...

Hasta que...

Llegaron los 2 terribles momentos en su vida...

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