Emma y Emilio, Venganzas a domicilio - Edición Especial (Primer "Aniversario")

• Ya me he cagado en su puta madre... - dijo Emma Santana.
• ¿Porque? - dijo Emilio.
• Porque nuestro negocio se va a pique, cari... - dijo Emma, respirando profundamente.
• Solemos tener un cliente al mes... En estos últimos 2 meses hemos tenido a 2 señores y a una maruja. Con la crisis, el negocio de las venganzas es rentable. Eso, junto a los detectives, putas y alquiler de armas para suicidios por ejecución hipotecaria son los negocios mas rentables en épocas de vacas flacas. - dijo Emilio, encendiendo un cigarrillo.

La pareja estaba en la cama. Desnudos pero con mantas cubriéndolos  conversaban. Emma tenia los pelos alborotados y Emilio tenia una sonrisa de oreja a oreja. Emma se irguió, asustada. Tenia el torso desnudo.

• ¡Encima, me van a echar de mi trabajo! - dijo la chica, asustada de una forma cómica.
• Teniendo conocimientos de Informática .. ¿Trabajas en un supermercado? ¿Porque coño no estudiaste o te sacaste algo técnico? - dijo Emilio.
• Claro... Que fácil para el picoleto que con su porra azota a esos pobres ancianos...
• Y dale... Estas pesadita, ¿eh? - dijo Emilio, dándole una calada.
• ¡Es que me van a echar! - grito Emma. - Debí acostarme con mi jefe...
• Pero si tienes jefa... - dijo Emilio.

Emma dudo.

• Bueno... Pero aun así... - dijo Emma, como una niña.
• Ademas... No pasa nada. Si te echan, te vienes conmigo a la policía. Podría colocarte como becaria sexy del Capitán Canuto... - dijo Emilio, dándole otra calada.
• Por favor... - dijo Emma. - Eso es enchufismo...
• ¿Y? ¿De verdad el orgullo vale para algo en estos momentos de crisis? Si la gente tuviera la posibilidad para que la enchufen...¿No crees que lo harían?
• A mi si que me importaría... - dijo Emma, recostándose sobre el torso desnudo del chico.
• Como quieras pero piensa que debes traer el pan a esta casa... O al menos la parte para el alquiler... Bendita la hora que te convencí para no meternos en hipoteca... - dijo Emilio.
• ¿Y para que voy a traer "pan" a esta casa si no tengo hijos? - dijo Emma.
• ¿Es que te tengo que mantener? - dijo Emilio.
• ¡¡Pues podrías!! - dijo Emma, furiosa.
• Si, claro... - dijo Emilio, irónicamente.

Emma se separo de el y se puso en pie, rápidamente. La chica le grito y se refugio en el baño.

• Emma... ¿Que haces? - dijo Emilio.
• ¡¡Me voy a suicidar!! ¡¡Me beberé tu loción para el afeitado!! - grito la chica, como una loca.
• Como Bon Scott... ¡Oye! Si la terminas... ¿Me podrías comprar otra? - dijo Emilio, irónicamente.
• ¡¡¡ IMBÉCIL!!!

Se escucho a alguien tomar algo. Un sonido de gárgaras... y otro de alguien escupiendo lo.

• ¡¡Que asco!! - grito Emma, como una loca.
• Claro, coño... - dijo Emilio, con toda la tranquilidad del mundo.
• ¡¡Pues me corto las venas con tu afeitadora descartable!! - grito Emma.
• ¿La roja o la azul? - dijo Emilio, como si todo eso fuera normal.
• ¡¡La azul!! - grito Emma.
• Con esa me depilo la entrepierna... - dijo Emilio, sonriendo.

Se escucho a alguien resbalar.

• ¡¡¡QUE ASCO!!! - grito Emma.
• Claro, coño...
• ¡Pues... pues...! ¡¡Que mierda de casa!! ¡¡Si suicidarse puede una!! - grito Emma.

La puerta del baño se abrió y salio Emma, totalmente tranquila.

• Bueno... - dijo Emma quitándose los pelos de la vista. - La vida sigue...
• Claro que si... - dijo Emilio y abrió los brazos.
• Pero hoy me llevas a cenar... - dijo Emma.
• Claro... Si ya tengo un sitio reservado y todo... - dijo Emilio, abrazando a su amiga.
• ¡Que bien! ¿Y como se llama?

Emilio puso cara de poker.

• Eh... Mmm... ¿Me dejas revisar la agenda? Es que tiene un nombre un poco raro...

Emilio se levanto de la cama y cogió las paginas Amarillas.

• A que bonito... - dijo Emma furiosa. - ¡Mas te vale que sea un sitio caro!

Justo cuando Emilio revisaba las paginas amarillas, sonó el timbre.

• ¡Ya llego! - grito Emma.

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Subía las escaleras. Bueno, subía .. Me arrastraba... ¿Pero porque coño habré puesto la casa de Emma Santana en un séptimo y sin ascensor? Creo que debería bajar de peso... O al menos desarrollar algo de resistencia... Porque esto es una mierda bien gorda...

Llegue al fin, por fin... Después de chutarme una dosis de salbutamol, levante el brazo(que me pesaba por el cansancio) y toque el timbre. Pasado unos segundos, alguien abrió la puerta.

• ¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!! 
• ¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!! 

El primer grito fue de Emma Santana. La chica grito como una fan enamorada al verme. Mi grito fue mas un grito de esos que te producen una angina de pecho... Cuando el pulso se me estabilizo, vi que Emma Santana estaba semidesnuda. Jadeaba, por lo que entendí que había ido corriendo.

• Buenas tardes, Emma... - dije, recuperando el habla.
• ¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!! - me contesto la chica, haciendo gestos de niña emocionada.
• ¿Hace falta que grites? - dije.
• ¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!! - me contesto Emma. Ahora movía los puños como una niña berrinchosa.
• Joooooder... - dije, agachando la mirada.
• ¡¡Emma, por el amor de Dios, VÍSTETE!! - grito Emilio.

Un hombre con una bata se me acerco. Fumaba un cigarro y sonreía.

• Así que tu debes ser el gran creador... Soy Emilio Alonso... - me dijo Emilio
• Obvio que sabes quien eres, idiota... - dijo Emma Santana. - ¡¡¡¡AAAAAHHHHH!!!! - volvió a gritar la chica
• Emma... Ya vale... - dije.

Ambos personajes me dejaron entrar. La casa estaba débilmente iluminada. La mesa del comedor fue nuestro destino.

• ¿Que tal? - me dijo Emilio, ya vestido.

Emma Santana entro a la sala con su mejor vestido de gala puesto.

• Madre mía... - dije, agachando la cabeza. - ¡Que yo estoy aquí para ayudaros en vuestro próximo caso! 
• ¿Tenemos un próximo caso? - dijo Emilio.
• Si... bueno, esta ves nos acompañara un personaje del universo de Emma Reyes. Se podría decir que vamos a conectar este universo con el de Episodios desde Madrid. Bueno, ese era la idea principal pero como supone mucho papeleo, lo vamos a hacer mas practico: Ella va a "venir" desde su universo a este con todo y problema incluido. Y nosotros vamos a solucionarlo. Pero las personas solo serán exclusivas de esta historia... ¿Vale? - dije, explicándoselos.
• Me parece bien... - dijo Emilio.
• ¡A mi también! - dijo Emma, pegando un bote.

El timbre sonó otra ves. Emma pego un bote y Emilio se fue al cuarto, a cambiarse. Yo me puse en pie. Emma vino por detrás y me abrazo.

• ¡Joder, que pelotas sois! - dije. 
• Es que Emma Reyes nos dijo que fuéramos buenas contigo... - dijo Emma Santana.
• Madre mía...

Abrí la puerta. Afuera había una chica que conocía porque era una creación mía. Andrea Zalbuena Figueroa, de Episodios desde Madrid, estaba delante de nosotros.

• Joder... - dijo Andrea.
• Ya... Yo también podría decir lo mismo, pero de una forma mas halagadora. - dije.
• Hola... - dijo Emma Santana.

La mire. Debía de decir su frase.

• Emma... - dije, mirándola de reojo.

Emma siguio con una sonrisa estúpida.

• Frase... - dije, empezando a perder los nervios.

Emma siguio mirando a Andrea. De pronto lo entendio y dijo:

• ¡AH! ¡Claro, claro! - dijo la chica. Tomo aire. - ¡Bienvenida a Emma y Emilio, Venganzas a domicilio! 

Andrea levanto una ceja.

• Vaya mierda... - dijo la chica.
• Pasa, pasa... - dije, sonriendole a Andrea.

Andrea paso al interior de la casa y empezó a ver la decoración. Emma, con una sonrisa en los labios, se sentó y espero con muchas ganas lo que Andres dijera. Emilio llego, saludo a Andrea y se sentó  Yo espere a que Andrea dejara de mirar la decoración. Pasado unos segundos, dije:

• Bueno, Andrea... ¿Que tal tu universo? - dije.
• Mal... ¿Sabias que mi padre tenia una cuenta en el banco que atracasteis? Menos mal que esa historia no paso pero jode mogollón... - dijo Andrea.
• Bueno... - dije, intentando no pensar en el robo del banco. - Cuéntanos tu problema... 

Andrea tomo aire, Emilio apoyo la barbilla en su palma y Emma se sentó de una forma infantil, como una niña en su primer día de colegio.

• Veréis... Hace unos meses conseguí trabajo como becaria en el despacho del Concejal de Oposiciones y Empleo...

Emma ahogo una carcajada. Hizo un sonido con la nariz.

• ¿Se ha reido? - dijo Andrea, sorprendida y furiosa.
• No, no... Lo que pasa es... - dijo Emma, en un tono muy falso. - Es que me he constipado...
• Claro... - dije, mirándola y dirigiéndole una mirada de advertencia. - Sigue, Andrea...

Andrea me miro.

• ¿Se supone que me debo de enamorar de ti? Joder, que depresión... - dijo Andrea.
• Lo tuyo es digno de libro, Mariete... - me dijo Emilio. - Te rechazan hasta tus creaciones...

Resople.

• Sigue, Andrea...- dije sin perder los nervios.
• El caso es que conseguí ese trabajo gracias a Emma...
• ¿A mi? - dijo Emma Santana.
• La Reyes, coño... - dije.
• ¡Ah! - dijo Emma Santana.
• ¿Y que paso? - dije, mirándola.
• El caso es que... Ese tío es un jodido viejo verde y pervertido. Se me insinúa y no solo a mi, si no también a las demás chicas del grupo de becarias. Coño, si se le insinúa hasta a su secretaria... Se me ocurrió rechazarlo, cosa lógica .. Pero lo único que he conseguido es que trate peor que al perro... Encima no puedo denunciarle porque me dijo que conocía al juez que dicto un antecedente sobre un veredicto de un caso donde tocarle el culo a su secretaria no era delito. Es mas, el me podía pedir una indemnización a mi. - dijo Andrea, con el semblante triste.
• Que cabrón... - dijo Emilio.
• ¿Y no has pensado en denunciarlo, pese a todo? - dijo Emma.
• ¿Como? Si ese tío tiene muchos contactos y esta mas blindado que un tanque... Al fin de cuentas, yo solo soy una "empleaducha" - dijo Andrea.
• ¡"Ta' que yo voy y lo reviento! - grito Emma, haciendo un amague de ponerse en pie.
• Quieta ahí, Emma... - dije, cogiéndola del brazo.
• Tranqui, Emma... De nada sirve alterarse... - dijo Emilio. - Sera concejal pero para mi eso cuenta como un político mas. Si se gastan el presupuesto en trajes, no les pagan a los bomberos, exigen 3 coches oficiales... 
• Ya... pero me revienta no poder hacer nada... - dijo Andrea.
• Si que puedes... Para eso estamos nosotros... - dijo Emma, cogiéndole de la mano.
• ¿Nos disculpas unos segunditos, Andrea? - dije, poniendome en pie y haciendoles un gesto a Emilio y a Emma.

Emma y Emilio me siguieron hacia una habitación de la casa.

• Bueno... ¿Que os parece? - dije, mirándolos a los 2.
• Que paso de todo... ¡Yo le parto las piernas! - dijo Emma.
• Tranquilidad... - dijo Emilio. 
• Serenidad... - dije yo. - El negocio de las venganzas nunca ha tenido que recurrir a la violencia.
• Coño, en este caso si... - dijo Emma.
• Lo que debemos hacer... es joderle la vida al concejalucho ese. - dije, frotándome las mano. - Hay que joderle la vida a ese cabrón.
• ¿Y eso no es peor que partirle las piernas? - dijo Emilio.
• No... - dije, mirándolo  - Partirle las piernas es infantil. En cambio, demostrándole que donde las dan las toman es reconfortante
• Donde las dan las toman... ¿Y eso no es infantil? - dijo EMilio.
• No, eso es defensa propia... - dije, con un gesto de listillo.
• ¿Defensa propia? Pero...
• ¡¡¡YAAAA!!! - grito Emma. - Emilio, cari... ya basta...

Me quede pensando.

• Bueno, el Emil tiene razon... A lo mejor ese viejo no tiene la culpa de actuar asi...
• ¿¡Lo estas defendiendo!? - grito Emma, enfurecida.
• ¡NO! Lo que digo a lo mejor el viejo nunca tuvo una buena mujer o quiza nunca tuvo exito con las chicas...
• Como tu, vamos... - dijo Emma, mirándome.

Emilio estallo en carcajadas.

• Coño, Emma, no hace falta que me bajes la moral. - dije, bastante dolido.

Emma se rió.

• El caso es... que vamos a investigar a ese cabrón  Si encontramos motivos para "empapelarlo", que seguro que lo encontramos, entonces procederemos. Vamos a hablar con Andrea.

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• Eso es mas aburrido que ver una maratón de caracoles... - dijo Emilio.
• Pues no haber venido... Coño... - dijo Emma, comiendo unos aros de cebolla.
• ¿Es normal que este comiendo todo el rato? - dije, mirando como Emma no comía .. engullía los aritos de cebolla.
• Si... luego se siente mal y antes de vomitarlo, se mete a un entrenamiento fuertisimo... Una ves se desmayo por el cansancio físico. - dijo Emilio.
• Bueno, al menos no es bulimica... - dije.
• Eso fue hace 2 años... Menos mal que conseguí hacérselo superar...

Emma, pese a tener la boca llena, bebió un trago de Coca Cola. Lo paso todo como si intentara hacer pasar un libro por una pajita.

• Bueno... ¿Alguna novedad? - dije, mirando con unos binoculares hacia una casa.

Nos encontrábamos en Madrid. En una calle llena de edificios altísimos  Emma comía, Emilio escuchaba algo en un ordenador y yo miraba a través de unos binoculares.

• Lo único que escucho es a ese tío hablar con su concejo. Me parece escuchar la voz del alcalde... - dijo Emilio.
• ¿ Algún plan, Mariete? - dijo Emma, echándole mayonesa a sus patatas.

Pensé... Un plan para humillar a ese tío...

• Yo ya tengo un plan... Pero le vamos a joder la vida pero a fondo... Puede que tenga problemas con la ley... - dijo Emilio.
• ¿Si? - dije yo. - Me importa una mierda...
• A mi también... Un tío que se gasta el dinero en sus cosas mientras la gente se muere de hambre... no se merece piedad.
• ¿Y que hacemos, entonces? - dije, mirando al edificio.

Emilio sonrió.

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El Concejal de Oposiciones y Empleo llegaba en su coche al Ayuntamiento de Madrid. Se bajo del coche y automáticamente un miembro del grupo de aparcacoches corrió hacia el.

• Toma, aparcamelo... Y no le pìses, ¿eh? - dijo el Concejal . - Y disculpa si no te doy propina, que la crisis...
• Claro, señor... Como no va a ver dinero... Si se lo gastan todo ustedes...
• ¿¡Como!?
• No que... Si hacen lo que pueden ustedes... - dijo el aparcacoches, sonriendo forzadamente.

El Concejal entro en el ayuntamiento. Dentro le esperaban, en su despacho, Andrea y otro grupo de chicas. 

• Señor Concejal, tiene pleno en el despacho del Alcalde... - dijo una chica castaña.
• Vale... vale, guapa... ¡Figueroa! - dijo el concejal, llamando a Andrea. - Mas tarde hablara contigo... - dijo, en un tono muy provocativo.

El concejal salio de su despacho y se dirigio al del alcalde.

Pero pasado un par de horas, el Concejal de Oposiciones y Empleo salio, tras humillar una ves a Andrea. Al llegar, llamo a un aparcacoches para que le trajera su coche. Este, que era un chaval rubio, asintio y se dirigio hacia el parking. Volvio con el coche del Concejal. El Concejal ni siquiera le dio propina y subio al coche.

Pero justo cuando subio al coche, 2 coches policiales arribaron con sus respectivas alarmas. De cada coche, bajaron 2 policias.

• ¡Policia! ¡Alto! - dijo Emilio Alonso.
• ¡Salga del coche con las manos en alto!  - grito su compañero.

El fiscal salio, totalmente desconcertado. 2 policias se le acercaron. Le dieron media vuelta y lo pusieron contra el coche, cacheandolo.

• ¿¡Tienes idea a quien estas jodiendo!?  - grito el Concejal. - ¡¡Haré que te quiten la maldita placa, cretino!! ¡¡Soy intimo amigo del Alcalde!!
• ¡¡Callate!! - grito Emilio. - Dani, ¿Has encontrado algo alli atras?
• ¿Que si he encontrado algo? Tiene tanta mierda como el cartel de Medellin...
• ¿¡QUE!? - grito el Concejal, al ver la droga que extraian de su maletero. - Imposible, si yo nunca...
• Una defensa elocuente, coleguita... - dijo Emilio Alonso, extrayendo sus esposas.

La policia empezo a detenerlo. Arriba, entre todala gente que contemplaba la escena, Andrea miraba a su jefe con mucha sorpresa...

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• Bueno... - dijo Emilio - Lo mas dificil fue dar el cambiazo del coche.
• ¿Seguro que no nos pillaran? - dijo Emma, vestida de secretaria castaña.
• No mientras nadie se de cuenta que la cinta de la cámara es una representación hecha por nosotros. Ademas, las 2 toneladas de marihuana va a echarle mas culpa, ¿no? - dije yo, mirándolos.
• Como agente de policía que soy, nadie se dará cuenta de que solo las primeras bolsas son marihuana de verdad. Las demás, son solo relleno. Pero nadie dirá nada... ¡Resulta que en el ayuntamiento tenían ganas de quitarse de en medio a ese tío! - dijo Emilio.
• Sois una panda de cabrones... Lo que habéis hecho esta super mal... Pero no he podido evitar sonreír... - dijo Andrea. - Supongo que gentuza como esos, que joden y joden el pais a diario... merecen eso y mas

Emma, Emilio y yo nos reímos.

• Toma, Andrea... - dijo Emma, dandole una tarjeta. - "Emma y Emilio, Venganzas a domicilio"

Me puse en pie.

• Preparate, Mariete... Ahora te toca una aventura de miedo... - dijo Emma Santana.
• La verdad es que si... Creo que deberé llevarme un par de Inhaladores para sobrevivir... - dije, sonriendo.

Todos nos reimos juntos.

Continua en Inmortales - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

Tradiciones G/Cinthianas - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

• Baja en Abancay, por favor... - dije, dándole una moneda al cobrador.

Me encontraba en el autobús La 9, rumbo a la avenida Abancay, en Lima Perú. Seguía con mi peregrinación por los distintos universos a los cuales doy forma con cada historia. Tras pasar por el universo de Madrid y el diván de Emma Silverman, ahora tocaba un poco de mi querida patria... Osea, este puto país.

Llegue hasta Hiraoka. No había nada interesante. Seguí avanzando, dirigiéndome a Jirón de la Unión  Llegue hasta un portal antiguo, de esas casas que aun tienen balcones. Subí las escaleras de madera, llegue hasta el ultimo piso, toque la puerta... y Mario Tunquiri me abrió la puerta, sonriendo.

• Hombre... El "Creador"... - dijo Mario, sonriendo.
• Buenas... - dije, entrando.

Dentro, no había gran cosa. Una cama, una mesa, una minicocina, una puerta que daba al baño, otra puerta cristalizada que daba a la terraza, un sofá y una TV. Todo estaba ordenada de una manera muy apretada. Casi no habia espacio para nada mas.

También había una chica sentada en la cama. Era alta, palida y muy guapa. Me sonroje, porque fue verla y recordar a una compañera.

• G/Cinthia... Joder, ya no me acordaba lo guapa que la habia creado... - dije, saludandola.
• ¡Hola! - me dijo la chica, sonriendo.
• He visto en quien te basas a ella y... ¡Joder, si que la has mejorado bastante! - dijo Mario, sonriendo.
• La original tampoco esta tan mal... Pero ella... - dije mirando a G/Cinthia. - Bueno, a lo que iba...
• ¿Que tal? - me dijo G/Cinthia.
• Bien, mujer... Aqui, visitándoos...

G/Cinthia me sonrió y se volvió a sentar en la cama. Mario se sentó al lado de ella. Yo busque el sofá y lo arrastre hasta estar al frente de ellos. Cuando me puse cómodo, vi como Mario y G/Cinthia me miraban. La chica me sonrió...

• ¿Se lo dices tu o se lo digo yo? - dijo Mario.
• Mario... - dijo G/Cinthia, dirigiendose a mi. - ¿Me cuentas un cuento?

Me tape la cara con las manos. Como decirle que no...

• Estas mal, eh Mariete... Deberias buscarte una novia... - dijo Mario.
• Ya... Pero no es facil... - dije, sonriendo.
• Claro... - dijo G/Cinthia.

G/Cinthia volvió a sonreír.

• Bueno, allá que va...

Me aclare la garganta...

• Había una ves, un joven guerrero que nació en las llanuras del altiplano andino. Resulto ser un joven fuerte, aguerrido, recio. Y esas condiciones en el imperio incaico era digno y único de unos pocos. Pasaba el tiempo y ese joven crecía notablemente. Se alisto a las fuerzas militares y encontró su vocación  Domino el arte de la honda, de la flecha y de la lanza. Tallo su cuerpo en un conjunto de músculos y llego a estar entre las élites incaicas. Pero su esplendor llego cuando lo reclutaron  para la guardia personal del inca Atahualpa. Nuestro joven guerrero lo celebro, corriendo por el imperio. Esa misma noche, conoció a una mujer, una Aclla. Pasaron la noche juntos, disfrutando de sus jóvenes cuerpos. Antes de sucumbir al sueño, aquella Aclla le dijo algo curioso. Días antes, un explorador se encontraba en la costa y había visto desembarcar a grandes "arboles" flotante. Llevaban unas telas inmensas con un símbolo rojo grabado en ellas. De esos "arboles flotantes", descendieron hombres con vello en el rostro y piel brillante. Pero al joven guerrero, quien había bebido grandes alforjas de chicha de Jora, sucumbió ante la paz del sueño. - dije, tomando aire. - Al volver al Cusco, estallo la guerra civil. Huascar, hermano del inca Atahualpa, decía ser el autentico inca y el heredero al trono. Pueblo que eran hermano iniciaron una cruenta guerra civil. El joven guerrero vio como su propia gente luchaban entre ellos. Pero Atahualpa se impuso y derroto a las fuerzas de Huascar, apresándolo. Nuestro joven guerrero, quien lucho con fiereza y valor, celebro la victoria por todo lo alto. Solo quedaba esperar la ejecución del hermano del inca para certificar la victoria. Pero mientras estaba en la corte del Inca, un mensajero llego. Un grupo de exploradores solicitaba una entrevista con el Inca, en el norte... En Cajamarca. El Inca acepto, pero le dijo al mensajero que primero ejecutaría a su hermano antes de ir. Cuando el mensajero se disponía a irse, el joven guerrero se acerco al mensajero y le pregunto como eran esos exploradores. El mensajero le dijo que eran "dioses". ¿Dioses? El mensajero dijo que eran altos, pálidos  con vello en el rostro. Su piel era de hierro y algo mas. Tenían unas bestias cuyos rugidos se podía escuchar a la distancia. El joven guerrero sintió un nueva sensación. Sintió miedo... - dije. Tome un poco de aire y seguí  - La ejecución de Huascar fue celebrada por nuestro joven guerrero. Su ejecución consistía en lanzarlo desde el acantilado mas alto. Nuestro joven guerrero participo en la ejecución  sentenciando al hermano del Inca. La posterior celebración fue apoteosica, tanto que se olvido que al día siguiente, partirían para Cajamarca. Pasado un par de días  el Inca arribo a Cajamarca. Nuestro joven guerrero presencio un momento clave: Los extranjeros... ¡No parecian humanos! De verdad parecían dioses... Su piel era brillante, solida, blanco... Cuando se movían, producían un sonido... el mismo sonido que producían los orfebres cuando trabajaban. Eran pocos... Mas o menos unos 20... Pero... pero... El joven guerrero vio sus ojos claros... Daban a entender 2 cosas: Miedo... y codicia. Miedo quizá por el ejercito personal del Inca... Y codicia, ya que no le quitaban los ojos de encima a los adornos de oro del Inca. Nuestro joven guerrero se convenció  brevemente, que esos extranjeros eran dioses. Hablaban en una lengua extraña, tenían abundante vello y su cuerpo era deforme. La parte superior era parecía a la de ellos pero tenían medio cuerpo de una bestias con 4 patas. Sus bestias eran terribles. Todos se asustaron excepto el Inca, pese a que una de esas bestias le soplo en la cara. En ese momento, se acerco un extranjero. No parecía un dios. Se parecía a ellos, al joven guerrero. No tenia vello en el rostro, salvo en la cabeza. Vestía telas blancas con un curioso símbolo grabado en el: 2 lineas rojas, una vertical y otra horizontal, cruzadas. Ese extranjero empezó a hablar, con un texto en la mano. Para sorpresa nuestra, el extranjero tenia a un Panaca entre sus filas. En ese momento no recordaba su nombre, pero parecía que entendía el idioma de los extranjero, porque nos dijo que decía el extranjero exactamente. Al traducir lo que decía  el joven guerrero no podía creer lo que oía  Hablaban que habían venido de una tierra muy lejana. Acusaban al inca de muchas cosas, entre ellas matar a su hermano y en adorar a falsos dioses e ídolos  ¿El dios Inti, un falso dios? Pensó el joven guerrero. Ellos, los extranjeros, venían a traer esperanza para nosotros. El joven guerrero desconfió ¿Entonces porque llevaban espadas y lanzas? Entonces ocurrió otro hecho. Los extranjeros que parecían dioses... mutaron. El joven guerrero se asusto al ver que esos dioses se partían en 2... Pero entonces, uno de ellos se acerco al extranjero que vestía de blanco y le dijo algo al oido. El joven guerrero desconfió totalmente. Aquellos extranjeros no eran dioses. Eran como ellos, tenain la misma forma, mismos brazos y mismas piernas. Solo su piel era distinta a los demás  Cuando el extranjero de piel blanca se acerco, todos se pusieron en guardia. El extranjero, a través del Panaca que tenían entre sus filas, dijo que el Inca debía de aceptar la palabra de algo llamado Biblia. El joven guerrero tenia ganas de atacarlos, por aquellos infamias que se atrevían a decir, pero si el Inca no daba la orden, nada podían hacer ellos. Pero el Inca no quiso. Cogió esa Biblia... y la tiro al suelo. - dije, tomando aire nuevamente. - El joven guerrero se sintió orgulloso de su monarca. Pero los extranjeros no. Empezaron a hablar en un tono agresivo, furiosos. El Inca se puso en pie, amenazadoramente. Fue entonces cuando empezó la guerra. El joven guerrero por fin entro en batalla. En un inicio, aquellos extranjeros no eran rivales para ellos, pese a que su piel era impenetrable. Pero el curso de la batalla cambio. El joven guerrero escucho sonidos atroces. Sonidos que le helaron la sangre, sonidos que penetraron su pabellón auditivo y lo paralizaron. El joven guerrero veía como sus compañeros alzaban la vista al cielo. "Los dioses nos han castigado" pensaban todos. Hasta el Inca estaba asustado. El joven guerrero no podía luchar... hasta que se dio cuenta. Todo eso, el sonido, el humo, ese extraño olor... coincidía cuando los extranjeros usaban sus armas, esas extrañas lanzas con metal. El joven guerrero supo que no eran sus dioses... Pero era tarde. Los extranjeros capturaron al Inca. Fue un extranjero con un casco con plumaje color verde y rojo. Los demás guerreros dejaron de luchar. Todos, sin necesidad de cadenas o grilletes, se volvieron prisioneros de los extranjeros. Colocaron al joven guerrero en fila con sus compañeros, incluido el Panaca que estaba en las filas de los extranjeros. El joven guerrero le pregunto quien era y me dijo que en ese momento se llamaba "Martinillo" y que esos extranjeros eran "Españoles". Martinillo dijo que eran 3 "dioses": Pizarro, el que se había acercado al español de ropas blancas, Almagro, quien capturo al Inca y Hernando de Luque, quien era el español de ropas blancas. - dije, tomando aire. - Se dirigieron hacia uno de los centros urbanos de Cajamarca. Los españoles pidieron un rescate por el Inca. Sabían que había oro, ya que conocían de las maravillas del imperio. El inca, en una habitación  les prometió 2 cuartos inmensos llenos de oro y plata. El joven guerrero vio la codicia reflejada en los ojos de los españoles. Los españoles aceptaron y el Inca ordeno a su guardia personal que supervisaran la llegada del oro desde todos los rincones del Tahuantinsuyo. Cuando empezó la llegada del oro, el joven guerrero se encontró con aquella Aclla que conoció esa noche. Ella traía oro y plata de su poblado. Al verla, el joven guerrero desconfió de los españoles. Pensó en "traicionar" al Inca. Y así lo hizo. Junto a 9 compañeros que pensaban igual que el, robaron el oro y plata y huyeron de aquel lugar. Los 9 compañeros se llevaron a sus familias consigo. El joven guerrero tomo por esposa a la Aclla y la llevo consigo. Se dirigieron hacia Puno, al Altiplano. El joven guerrero sabia que la altura seria un impedimento para los españoles, ignorantes del terreno de estas tierras. Pero u grupo de españoles los persiguió  El joven guerrero, en plena escapada, se sacrifico por todos ellos. Aprovechando un paso nevado, provoco una avalancha, cortando el paso y dándole un valioso tiempo a sus compañeros. Mientras agonizaba, los españoles se burlaron de el. Le dijeron que su Inca había sido acusado de idolatría, fratricidio, poligamia e incesto. Que fue bautizado con el nombre de "Francisco" y que fue ejecutado ese mismo día  El joven guerrero vivía sus últimos segundos de vida... La muerte del Inca llevaría a una anarquía en el Imperio... Pero nunca lo supo, ya que dando su ultimo aliento cuando gritaba mirando al dios Inti, el dios Sol, el joven guerrero murió. - dije, tomando aire. G/Cinthia me miraba con los ojos brillosos. - Pero, estando a salvo, aquella mujer, aquella Aclla... miro al cielo. Las 9 familias decidieron adoptar nuevas identidades... La mujer, mirando al cielo, vio un cóndor volar hasta el infinito cielo... Supo entonces que identidad asumir. Y sobre todo, que identidad asumiría la nueva vida que crecía en su interior. (1)

Termine el cuento de una forma peliculera. G/Cinthia tenia los ojos humedecidos. Mario Tunquiri iba a decir algo pero le corte

• ¿Vas a llorar? - dijo Mario Tunquiri. - Si ha sido algo épico
• ¡No voy a llorar, estúpido! - dijo G/Cinthia. 
• De verdad, Mario... - dije, mirando a mi homónimo. - Eres un poquito cabrón...
• ¡Eso! ¿Solo un poquito? ¡Es malo conmigo!

Me rei. Me puse en pie...

• Lo hiciste bien en el capitulo del robo al banco... - dije, estrechándole la mano.
• Fue... divertido... - dijo Mario Tunquiri.
• ¿Nos volveremos a ver? - dije, mirando a G/Cinthia, quien sonreía.
• Eso lo decidirás tu... - dijo Mario Tunquiri.

G/Cinthia se puso en pie y me abrazo. Sentía 2 cosas: Satisfacción... y que pelotas eran todos...

• Nos vemos... Pasárosla bien y usad condón..
• ¡Estúpido! - grito G/Cinthia.

Mario y yo nos reímos.

Continua en Emma y Emilio, Venganzas a domicilio - Edición Especial (Primer "Aniversario")

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(1) .- Así hablo Huayna Panqui Condori, primer descendiente nacido en el Virreinato de Nueva España

El divan de Emma Silverman - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

(NOTA DEL AUTOR: Este capitulo es la continuación de El divan de Emma Silverman - Segunda Sesion)

(Carly Rae Jepsen - "Call me maybe")

Emma Silverman caminaba mientras bebía una cerveza, cantando. Eran las 8 y media de la mañana y la mejor psicóloga de Madrid, según su madre, desayunaba cerveza.

• Hey, I just met you... and this is crazy... but heres my number... so call me, maybe... - cantaba la rubia treinteañera.

La psicóloga ordenaba sus libros, su mesa, su ordenador... Extraía una libreta, un boli y se sentó a esperar mientras escuchaba la música y la cantaba.

La psicóloga se acerco a su reproductor de MP3, deslizando sobre su silla con ruedas y cambio de música...

(Bruno Mars - "Lazy Song")

• Y asi es como me siento... - dijo Emma Silverman.

Emma Silverman se recostó en su asiento, estirando sus largas piernas encima de su mesa. Sentía el sol en su rubio cabello y el sonido del reproductor entrándole directamente a la oreja. Era una sensación agradable. 

La psicóloga encendió el ordenador. Justo cuando empezaba a teclear, la puerta del diván sonó. Por algún extraño motivo, el MP3 se apago.

• Vaya, hombre... A que va a ser verdad eso que donde va el, algo malo tiene que pasar... Por favor, Dios, Alah, Buda y el monstruo del Espagueti Volador... ¡Denme fuerzas! 

Emma Silverman se puso en pie, avanzando hacia la puerta. Antes de abrirla, tomo aire...

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¿Pero porque coño me hacia esperar tanto? Eso pensaba mientras estaba de pie ante esa puerta que daba acceso al diván. De pronto la puerta se abrió.

Alli estaba... Una de mis creaciones mas raras... Alta, treinteañera, con el cuerpo de un mujeron. Rubia natural, con gafas que le daban un aire a bibliotecaria viciosilla y una cara de guarr... Bueno, una cara sexy  La mujer se me quedo mirando...

• ¿Sabes? - dije, sonriendo como un idiota ante esa mujer. - Me recuerdas a mi amiga Naomi, mi profesora de Filosofía en Quinto año. Lastima que haya acabado discutiendo con ella... Claro que esta ves, una única ves, no fue culpa mía. - dije, agachando la cabeza.

Emma Silverman me miro.

• Ni siquiera hemos empezado la sesión y ya me están mintiendo. ¿Como vas a discutir con alguien y resulta que no fue culpa tuya? - dijo Emma Silverman. - Si fueras otro paciente, lo sabría  Pero siendo tu... Si discutes con alguien, SIEMPRE debe ser culpa tuya...
• ¿Verdad? - dije. Sonrei. - Pero esta ves no lo es... Ya lo veras...
• Pasa...

El diván olía de puta madre  Un olor mejor que el de los aeropuertos. A ese olor se debía de sumar el perfume de 500 euros de la psicóloga  Era un buen truco psiquiatra: Ese olor podría ablandar a muchas personas. De hecho, me estaba relajando al olerlo...

• Recuéstate, Mario... - me dijo la psicóloga, cogiendo una libreta y un boli. 
• Vaya... ¿No deberíamos conocernos antes? - dije, sonriendo.
• Vaya... No empezamos y ya me estas tocando lo que no tienes... Ademas, que coño... Soy mucha mujer para ti...
• No, no... - dije sonriendo de manera irónica. - Yo soy tu creador... Tengo control absoluto... 
• Lo que sea... ¡Tumbate!
• Vale... Joooooder que mala ostia... Normal que no ligues nada...
• Te he oido... - dijo la psicóloga. - Bueno, empecemos con buen pie, por favor...

La tumbona era cómoda, negra, de cuero. Me relaje, desperezándome a gustito. Emma Silverman se sentó detrás de mi, cruzo las piernas y destapo su bolígrafo.

• Bueno, Mario Sergio Condori, nacido el 19 de Noviembre del año 1993, en el hospital de Ate Vitarte. 3 kilos y medio al nacer. Actualmente 19 años... Vaya expediente... - dijo la psicóloga  - Poca sociabilidad en Primaria, casi nula en Secundaria, enamoramientos platónicos, conducta impulsiva, ironía mal empleada en la mayoría de los casos, desconfianza a nivel general, versión racional de la vida y pensamiento ajedrecista. 
• Correcto... - dije.
• Casi nula experiencias con mujeres... Mas decepciones que victorias amorosas...
• Correcto... - dije.
• Lo curioso... El paciente es huraño, solitario... Pero veo que has desarrollado mecanismos de defensas... Algunos tan bruscos y hoscos pero útiles. Versión de la vida un poco aventurera... Negacionismo... Ateo... ¡Joder!
• Correcto...
• ¿Sabes que podría catalogarte de demente? Hay episodios de tu vida que así lo demuestran...

Me rei.

• El problema es que no eres tan especial como la gente dices ser... - dijo Emma Silverman.
• ¿Cuando he dicho yo eso? No soy especial... Mis "mecanismos de defensa" pueden ser originales... pero son simples.
• Tu personalidad es como un escudo. Escondes el hecho que te hacen daño pero te cubres bajo esa coraza de chico solitario y hosco... - dijo Emma Silverman.
• Solo quiero vivir mi vida tal y como es... Con amigos, amigas, una novia, padres separados pero con una relación formal... - dije.
• Pero eso cuesta... Ademas, eso solo pasa en la TV... En la vida real, no existen las vidas normales... De un modo u otro, acabaras preocupándote por algo... - dijo la psicóloga.

La mire. Desde mi posición, veía a la psicóloga revisar sus notas...

• No me mires las piernas... - dijo Emma Silverman.
• Jooooder... Ya no puedo ni mirar a mis propias creaciones... - dije.
• Culpa tuya... ¿Para que creas personajes guapas? Eso demuestra un comportamiento de reflejo. Te gustaría tener una novia como Emma Reyes, yo... Incluso como Emma Lopez...
• Como la Lopez no... Que ella me puede pegar... ¿No ves que tiene fuerza de tanto luchar con los zombies? - dije, sonriendo.

La psicóloga espero un rato. Se acomodo en su asiento y me dijo:

• Cuéntame acerca de tus mecanismos de defensa... - dijo la psicóloga.
• Bueno...
• Por cierto... Eh... ¿Las demás niñas no van a venir? Mi cardiologo dijo que eso no era bueno para mi...
• ¡Ah! ¡Ah no, tranquila! Se quedaron abajo. La pequeña Emma se puso a llorar porque quería tus panchitos. El conserje casi se vuelve loco. - dije, riendo.
• Gracias a esa niña he descubierto que no me gustan los niños...
• Puta envidia... - dije, sonriendo.

La psicóloga tomo aire.

• Cuéntame...
• Bueno... El primero de todos es el mecanismo de los malos recuerdos. Simplemente no me deprime recordarlos... Mucha gente intenta ignorar los malos recuerdos... Otros ignoran la muerte y cosas asi... Yo... yo mas bien lo veo una manera de aprender de ellos. - dije. - Es como ver una película .. Te sientas, lo "miras" y aprendes de ellos. Que dijiste mal, que no dijiste, que podías haber dicho... Es verdad que te puede chocar revivir ciertos momentos... Yo he llegado a sentir hasta el dolor de esos recuerdos... Pero ante todo se impone mi lógica... Que eso solo es un recuerdo. Nada mas...

Toma aire. 

• Me ha servido para darle un sentido en mi vida. ¿Sabes? Pienso que esta vida se debe cometer todos los errores que se pueda en la juventud. No todos, obvio... Hay algunos, como tener sexo sin protección  que te pueden joder a ti y a terceras... Pero salvo eso, es bueno hacer y decir cada gilipollez que se pueda. Aprende... Mucha gente llega a adulto sin haber hecho eso, creyendo que toda su vida ha actuado de forma correcta... y son unos adultos inmaduros... ¿Porque? Porque en su juventud le pareció correcta ser inmaduro, ignorante, groseros, desordenado, creído, "varonil" entre los hombres y soberbios. Crecen creyendo que diciendo algo, la gente te dirá lo contrario. Y sobre todo, debes aprender a vivir sin los demás  Se que es duro, pero es lo mas seguro. Si aprendes a vivir sin los demás, valoraras a los demás.
• Eso es contradictorio... No tiene sentido. Si alguien crece de forma solitaria, se vuelve huraño y... - dijo la psicóloga.
• ¡Error! La gente no es huraña porque son solitarios y amargados. La gente, sobre todo la anciana, es huraña y amargada... porque de jóvenes han tenido todo lo que han querido. De jóvenes son activos, sociables, estaban acostumbrados a tener a gente a su alrededor. Pero el tiempo pasa, las situaciones cambian... Antes de que se den cuenta, esos jóvenes ya no pueden follar como cuando eran jóvenes  ya no pueden beber ni festejar como jóvenes  Ya no tienen la fuerza física y mental para soportar ese ritmo de vida. Entonces se frustran, empiezan a lamentarse... Quieren "mas"... Piensan que no han vivido lo suficiente, piensan que no se han divertido lo suficiente... Y al final viven amargados...

La psicóloga me miro.

• Debería repasar mis apuntes pero no siempre es así... - dijo Emma Silverman.
• Dígame, señora Silverman... - dije, mirándola  Bueno, a ellas y a sus pantorrillas. - ¿No es el ser humano el que siempre quiere mas y mas?
• Correcto... - dijo la psicóloga.

Gire mi cuello. Me estire un poco y tome aire.

• El otro mecanismo de defensa... Mi liberador de estres. Esa me encanta... Y es bastante simple: Hacer que hasta la cosas mas simple sea una aventura. Gracias a esa tecnica, casi no sufro de estres y me mantengo feliz. 
• ¿Ah si?
• Es simple... Cualquier cosas imaginatela como una aventura épica  Cuando me mandan a comprar el pan... Me imagino como si fuera algo importantisimo. Corro, me paro en la esquina observando a todos, camino, constantemente volteo para ver si alguien me mira... ¡Y un truco buenísimo! Si algun día quieres representar esa aventura con palabras... Ponte un manos libres o el móvil en la oreja...¡Ese día que lo hice, parecía un soldado que hablaba por la radio! - dije, estallando en carcajadas.
• Madre mia... Te habran tomado como un loco... - dijo Emma Silverman.
• ¡Que va! ¡Fue la ostia! Alli, diciendo... "Me falta poco para comprar lo que me dijiste" o "Sigue, sigue... Ya voy llegando a mi destino" o "El paquete esta en posición" - dije, volviendo a reír.
• Madre mia... - dijo la psicóloga.
• En serio, señora Silverman... - dije, sonriendo.
• Pero ¿Como ves tu esas aventuras? ¿En que te basas?
• ¿Yo? ¿No es algo obvio? En videojuegos... - dije, sonriendo como un niño.
• Ya claro... - dijo la psicóloga.
• Pero la gente puede hacer eso con películas que ha visto o en libros que se ha basado... No es tan dificil... - dije.

La psicóloga tomo unos apuntes. Comencé a mover los pies.

• Entremos en algo mas fuertecito... El plano sentimental...
• Guau... - dije, sonriendo.
• Aunque Emma me paso tu conversación que tuviste con ella (NOTA DEL AUTOR: Thats Special Someone - Edición Especial), mencionaste varias chicas. Pero a ninguna te declaraste, ¿verdad?
• Correcto... - dije, sonriendo.
• ¿Que paso con G/Cinthia? - dijo Emma Silverman.
• Digamos... que era maja. Y un día que estuvimos solos, planeado por mi obviamente... Le dije que me gustaba...
• ¿Y?
• Cabe decir que esto fue en colaboración con la psicóloga Naomi, que te mencione anteriormente... Ella me ayudo a tener confianza y abandonar mi pensamiento ajedrecista por unos minutos... - dije, recordando.
• ¿Y?
• Pues fue la peor experiencia de mi vida. - dije, riendo.
• No parece que te afectara mucho...
• ¿Que podía hacer? ¿Llorar, deprimirme? Naa...
• ¿Pero que te dijo? - pregunto la psicóloga.
• Nada... Ni si ni que no... Se quedo callada, cerrando los ojos... Supe que era un momento incomodo... Así que cambie de tema... Ella lo entendió e hicimos como si eso nunca hubiera pasado nada... Hasta ahora estoy esperando su respuesta...
• ¿Pero porque no lo intentas de nuevo? - dijo Emma Silverman.
• Porque ya no quiero nada... Oh, que orgulloso... Ademas que... ¿Como puedo estar con una tia que no es directa? Si no le gusto que me hubiera dicho que no... Si le gustaba, que me hubiera dicho que si... Con eso me demostró cobardía...
• Cobardía que tu también compartes...
• ¡Clarinete chata! - dije, sonriendole a Emma Silverman.
• Llámame otra ves "chata" y vas a salir por la ventana... - dijo la psicóloga, seria.
• Hombre... Estas "fuerte", Emma, pero no creo que puedas cargarme, chata...

La psicóloga se puso en pie, furiosa.

• ¡Vale! ¡Vale! - dije, sonriendo y cubriéndome con ambas manos.

La psicóloga se sentó.

• ¿Sabes? A veces... hay veces que me sincero conmigo mismo. Me pregunto... ¿Que me importa de verdad en esta vida? Y me contesto a mi mismo... Lo laboral. Acabo de cumplir 19 años... y me aterra saber que cada año que pasa, es un año perdido en el mundo laboral. No me preocupa las amistades ni las parejas... Aunque esto ultimo quizá si pero solo por una experiencia... Me preocupa mas saber que acabare una carrera a los 24, cuando ya hay jóvenes de 21 con titulo. 
• Eso es algo que esta lejos de mis posibilidades. - dijo la psicóloga.
• ¿Sabes? También pienso...  en las cosas que me pasan. ¿ Influirá algo en el futuro? Ya he tenido experiencias de como algo sin importancia en el pasado puede influir en mi presente o en mi futuro. Y nunca ha sido algo bueno... Me aterra pensar que quizá algo que dije o algo que no dije... puede llevar consecuencias nefastas en esta vida... En el futuro...
• Deja de pensar en eso... La vida no es para pensar en el futuro... Cuando menos te des cuenta, el futuro no llegara y habrás desperdiciado el presente...
• El típico pensamiento juvenil infantil... ¡Vamos a festejar hasta morir, que solo importa el ahora! ¡Vamos a hacerlo sin condón  que solo importa el ahora! ¡Insulta y despotrica con los demás  que solo importa el ahora! ¡A la mierda los estudios, hay que juerguear con los amigos que solo importa el ahora! ¡Vive tu vida ahora, porque el mañana aun no llega! Y mientras dices esas gilipolleces, el hoy pasa... siempre pasa... y se convierte en ayer... ¿El futuro? El futuro siempre se convierte en hoy... ¿No lo ves? Los que realmente deben y quieren apreciar el hoy deben apreciar el futuro.

Emma Silverman se quedo pensando.

• A lo que iba...
• Cuéntame lo de tu amiga esa, la psicóloga Naomi... - dijo Emma Silverman.
• Es un poco largo de explicar. Solo te digo algo y no quiero hablar mas del tema: Fue un cumulo de circunstancias. Se supone que yo, al ser menor de edad, no debía decir ni insinuar nada a nadie. Y eso es lo que hice. Sabia que ella se jugaba mucho quedando a solas con un menor de edad, invitándome cerveza el día de navidad... Y un día que hablaba con un colega, este me dice: ¿Pero porque no le pides para salir? La psicóloga lo vio y se puso echa una furia. Habra pensado que me gustaba y que quería algo con ella. Eso era exactamente pero por respeto nunca dije nada. Me resigne a mirarla como una amiga. Pero gracias a ese inoportuno momento, me echo de su despacho. Y hasta ahora no se que ha sido de ella, salvo que enseña en la universidad San Marcos.
• Pfff.... - dijo la psicóloga. - Madre mía, si no es una cosa es otra...
• Eso es lo peor... Que me pasen cosas que en realidad no tengo la culpa de eso... Que la gente se enfade por las cosas que digo, lo entiendo... Pero por eso, sin que intervenga yo de manera directa... es jodido... - dije, recordando.
• Ya ves... - dijo la psicóloga.
• Por ultimo, Mario...
• Digame... - dije, sonriendo.

La psicologa tomo aire.

• Feliz "Aniversario"

Estalle en carcajadas. Pense que me iba a pedir que le cuente alguna otra cosa pero no fue asi... Sonrei...

• Gracias... - le dije, con todo la sinceridad que pude.

La psicóloga me abrazo. Pude sentir su perfume llenarme los pulmones. Deseaba quedarme asi para...

• Venga, venga, venga... - dijo separandose de mi. - Con eso es suficiente...
• Oye pues es verdad eso de que un abrazo reconforta... - dije, sonriendo.
• ¿Ahora entiendes el cometido ese de dar "Abrazos Gratis"?
• Pues si... Una ves, iba con Jenni por jirón de la Union y apareció un tipo de esos... - dije recordando. - Jenni le dio un abrazo y yo también.
• ¿Y? ¿Que tal?
• No se... Me pareció un abrazo mas...
• Bueno...

Me dirigi a la puerta...

• Ah, otra cosa... Dile a esas niñas que no monten tanto escándalo... Ya he tenido un ataque al corazón por ellas...
• Vale... Pero tranquila... Lo jodido va a ser decirle a la Lopez que lo siguiente va a ser una visita a G/Cinthia y sus tradiciones... - dije, sonriendo.
• Buah...

Y salí de ese diván, feliz por que esa rubia me haya escuchado.

Continua en Tradiciones G/Cinthianas - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

Episodios desde Madrid - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

• Que bien me sienta el traje... - dije, acercándome a la puerta de una casa.

Abrí la puerta del 6B en el barrio de Aluche. Lo primero que vi es que las Emmas me esperaban. Bueno, no todas. Estaban Emma Reyes, Emma Lopez, Emma a secas y la pequeña Emma. Había también un chico. Era alto, ancho de hombros y moreno. Sabia quien era... Leía unos planos en una mesa.

• Aquí esta... - dijo Emma a secas. - Mario... Sergio... Condori... - dijo, estrechándome la mano.

Emma a secas vestia elegante. Llevaba un traje con camisa y corbata. Pantalon y zapatos. Ropa rara pero elegante para una mujer. Emma Reyes, Emma Lopez y la pequeña Emma vestian parecidos.

• Ey... - me dijo el chico moreno. 
• Mario... - dijo Emma Reyes, dando un paso al frente. - Este es... Bueno... Mario Sergio Tunquiri. 
• Es un personaje en tu universo. Claro que se quien es, Emma... - dije, mirando al chico moreno. 
• Mario Condori es nuestro creador, Mario... - dijo Emma Reyes, dirigiéndose a Mario Tunquiri. - Es excepcional...
• Viendo su condición física... ¿Quieres que participe en esto? No le veo... - dijo Mario Tunquiri.
• Se supone que estos momentos nunca van a ocurrir en nuestra historia. Pase lo que pase aqui, se va a quedar aqui. Es suficiente... - dijo Emma Reyes.
• Sin animo de ofender, creador... - dijo Mario Tunquiri, dirigiéndose hacia mi persona. - No es suficiente... Se supone que el querrá que esto se asemeje a la vida real, ¿no es asi?
• "Episodios desde Madrid" es un intento de acercar a la realidad algo ficticio como vuestras vidas... - dije, furioso con mi personaje.
• Déjalo en paz, Mario... - dijo Emma Reyes, dirigiéndose a Mario Tunquiri.
• Reyes, ¿Te he dicho que me defiendas? - dije, enfadado.
• Uuuuhhh... - dijeron Emma Lopez y Emma a secas, incitando a la pelea.
• ¡Callaos ya! - grito la pequeña Emma.

Mire a Mario Tunquiri con furia. Que cabrón que era... Se suponía que ese personaje estaba inspirado en mi... ¿Era asi de cabron?

• Tienes razon, Emmita... - dijo Emma Reyes, dirigiéndose a su homónima. 
• Bueno, creo que eso da igual ya... - dijo Mario Tunquiri. - Solo os digo... Que no la jodais... 
• Lo intentaremos... - dije, acercándome a la puerta, dispuesto a salir. - ¿ Estáis listas?

Emma Lopez pego un salto y me siguió  Emma a secas avanzo con una sonrisa en los labios. Los ultimos en salir fueron Emma Reyes y Mario Tunquiri.

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• Vale, nos dirigimos a las oficinas centrales del Banco Central de Madrid, ubicado en el centro. Yo conduciré .. - dijo Mario Tunquiri.

Entre en un coche Seat. Sentado en el asiento del copiloto, Mario Tunquiri se abrochaba el cinturon. En el asiento de atras, estaban Emma Reyes, Emma Lopez y Emma a secas. La pequeña Emma iba sentada en los muslos de Emma Reyes.

• Bueno... - dijo Mario Tunquiri, acelerando el coche. - Lo vais a hacer así  Vais a entrar y cada uno de ustedes se encargara de un guardia de seguridad. La Lopez y Emma se encargaran de los civiles mientras tu, Mario, y Emma Reyes se encargaran de los empleados. Si alguno intenta algo, os lo cargáis sin miramientos....
• Es fácil decirlo para ti... - dijo Emma Reyes, dolida quizá ante la idea de tener que matar a alguien.
• Debe serlo... - dijo Mario Tunquiri.

Mario Tunquiri tomo una autopista.

• Cuando la situación este bajo control, Emma Reyes volara la puerta con los explosivos que le di. - dijo Mario Tunquiri.

Emma Reyes abrió una mochila que llevaba la pequeña Emma.

• Hay suficiente PE4 para abrirse paso en cualquier puerta acorazada. - dijo Emma Reyes.
• ¿PE4? - dijo Emma Lopez. - Nunca habia escuchado eso...
• Asi llaman los britanicos al C4 y a la Reyes le da por usarlo... - dije, mirando a traves del cristal.
• No pienso entrar al trapo, Mario... - dijo Emma Reyes. - Lo bueno es que este material es lo suficientemente preciso para reventar cualquier puerta sin destruir lo que hay dentro... Ademas que no dejara ningún rastro en los billetes, por lo que sera facil de lavarlos... - dijo, extrayendo un paquetito.
• ¿Ves, Reyes? Ya estas colaborando... - dijo Emma a secas.
• ¿Dejara rastros? - dije, imaginándome a billetes sucios. - ¿Te imaginas que subidon dará los restos de C4 si te metes una raya con esos billetes?

Mario Tunquiri estallo en carcajadas.

• Que encantador, Mariete... - dijo Emma a secas, dirigiéndose a mi.
• Es PE4, no C4... - dijo Emma Reyes...
• Joder, Reyes, ya pareces Hermione, corrigiendo a la gente... - dijo Mario Tunquiri.
• Lo que sea... Al menos soy sincero con mis hábitos .. Aunque no sea meterme rayas... - dije, mirando a las Emmas.
• No sabes nada acerca de eso, cariño... - dijo Emma Reyes, dirigiéndose a mi. - Yo si soy honesta en cuanto a mis demonios...
• He pegado en el clavo, ¿eh Mario? - dije, dirigiéndome a Mario Tunquiri, quien sonrió.
• La expresión es "He dado en el clavo", Mario... - me dijo Emma López.
• ¡NO! - dijo Emma a secas, irónicamente. - ¿Acaso crees que no lo sabia?
• ¡Que te calles, loca! - dijo Emma López.

Las Emmas empezaron a pelear.

• ¡Basta! ¿ Sabéis lo que tenéis que hacer? Cuando la puerta se abra... tu, Mario, iras a por el dinero mientras que ustedes chicas controláis las masas. - dijo Mario Tunquiri.
• Yo lo tengo claro... Si dejáis de discutir unos momentos, creo que esto podría salir bien...

A partir de ese momento, nadie dijo nada...

• Oye..., Mariete... - me dijo Mario Tunquiri.
• ¿Si? - le dije, mirándolo.
• Entiendo lo de un equipo formado por una abogada, una mata zombies y una chica... ¿Pero que coño hace ella aquí?

Mario Tunquiri giro el espejo retrovisor y enfoco a la pequeña Emma, quien pegaba la lengua al cristal del coche.

• Digamos que es mi arma secreta... - dije, sonriendo.

Nadie dijo nada  a partir de ese momento. Yo iba viendo las calles del centro. La verdad, cuanto mas veia las calles y la muchedumbre, mas me preguntaba si era lo suficientemente realista hacer un capitulo de un robo en este lugar. No parecía muy realista que digamos...

Llegamos al banco. Un edificio estilo gotico con unas dobles puertas de madera nos esperaban. Mario se estaciono enfrente, se quito el cinturón y nos dijo. 

• Poneos la mascara... Y mucha suerte... Pero sobre todo, pasárosla bien... - dijo, abriendo las puertas. - Esperad mi señal...
• Que sea limpio, chicas... - dije, bajando del coche. - Nada de victimas civiles...

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En el banco central de Madrid, la gente hacia sus transacciones de manera normal. Habia colas, las cjaeras hacian depositos, etc. Todo aparentaba normalidad.

• ¡QUE NADIE HAGA UN SOLO PUTO MOVIMIENTO!

Las dobles puertas se abrieron como si alguien las hubiera pateado.

Entramos. Fue Emma Lopez quien pego el grito, amenazando a los civiles con un rifle de asalto FN-SCAR. Emma a secas entro, siguiendola. Llevaba un rifle de asalto AK-47. Emma Reyes llevaba un rifle Steyr AUG. La pequeña Emma no llevaba arma alguna. Yo, llevaba la mejor (para mi) de todos los rifles: El rifle de asalto M4, "Carabina".

• ¡TODO EL MUNDO AL SUELO! - grito Emma a secas.
• ¡Nadie intente hacerse el heroe! - grito Emma Lopez, amenazando a todo el mundo.

Los civiles, asustados, se tumbaron en el suelo. Emma Reyes dio un paso al frente, asustada. Levanto los brazos, en un gesto de paz.

• Les juramos que no vamos a hacerles daño, solo queremos el dinero... Es para una buena cauz... - dijo Emma Reyes.
• ¡Callate! - le dije a Emma Reyes. Me desesperaba lo bondadosa que era. - ¡Reyes! Vamos, vamos a abrir las puertas.

Ambos nos pusimos en movimiento, hacia la puerta. Las cajeras estaban asustadas.

• Abre la puerta.... - dijo Emma Reyes.

No me lo podía creer. Emma Reyes apuntaba al cajero pero temblaba como si tuviera frió. Estaba acojonada.

• ¡Abre la puerta! - dijo en un tono mas serio. - Por favor...
• ¿¡Estas suplicando!? - dije, mirándola a traves de la mascara. 

Le hice un gesto al cajero. Apunte a un civil con el cañon de mi M4.

• Abre la puerta... - dije.

El cajero entendio el gesto.

• Vale, vale, vale... - me dijo. Se dio media vuelta, apreto un boton y la puerta se abrio.

Emma Reyes y yo entramos por la puerta. Emma Reyes llevaba una mochila. Yo corri hasta llegar a las mesas de las cajeras y de un salto me subi encima.

• ¡Todo el mundo al suelo! - dije, subido en la mesa. Podia ver a todos los civiles. - ¡Tu tambien! - dije, dirigiendome al cajero que me abrio la puerta.

La gente, entre gemidos y gritos, hizo lo que dije.

• ¿Teneis familia? ¿Teneis hijos? ¿Amigos? ¡No intenteis nada! ¡No hagan nada estupido! ¡No intenten hacerse los heroes! - dije, moviendome entre las mesas.

Cuando las "masas" estuvieron controlados, le hice un gesto a Emma Reyes. La abogada lo entendio, se colgo la mochila al hombro y se dispuso bajar hacia la boveda del dinero.

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En la antesala, Emma Lopez y Emma a secas caminaban entre los civiles. La pequeña Emma veia todo eso de una manera normal. Parecia aburrida.

Alejada, una mujer morena estaba tumbada en el suelo. Vestia un chandal rojo y encima un abrigo largo, negro. Llevaba una bufanda roja. Estaba asustada. Al lado de ella, un hombre mayor y canoso. Le hizo un gesto con la mano.

• Ey, tu... ¿Hola? Soy coronel en retiro y miembro del club de armas de Madrid. Voy a acabar con estas nenas malcriadas... ¿Como te llamas? - dijo el hombre canoso.

La mujer dudo.

• Judith... Judith Noemi... (NOTA DEL AUTOR: Judith se encontraba en el momento justo cuando Mario Tunquiri da el golpe al banco en el capitulo "Robando la boveda de Madrid" en Episodios desde Madrid) Pero no creo que se trate de una buena idea... - dijo la mujer, asustada.
• ¿Si? Cuando estaba en la mili, me iban a mandar a una mision. Nadie sabia si podian fiarse de mi, porque acababa de romperme la pierna por 13 sitios. Pero... Pero hice lo que tuve que hacer y capture a 5 etarras, 2 vascos y 1 catalan que dijo "Abajo el rey". El mundo esta hecho de malas ideas, mujer... - dijo el viejo.

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Emma Reyes volvia de la boveda. Me hizo un gesto y la segui.

• El PE4 ha sido instalado y explotara... - dijo la letrada, mirando su reloj. - En 60 segundos...

Los civiles se asustaron.

• Ahora, ¡Escuchenme, gente! - dijo Emma Reyes, levantando sus brazos, en un gesto de paz. - ¡Somos sus amigos! No vamos a hacerles daño... Mis hermanas y nuestro creador...
• ¿¡Pero porque coño les dices eso!? - grito Emma a secas, girando el cuello. - ¡¡Asi va a ser mas facil encontrarnos luego!! - dijo, enfadada.
• Solo intento ser honesta con esta gente. - dijo Emma Reyes, en un tono maternal . - Ya han sufrido mucho con los ajustes del gobierno y ahora todos sus ahorros van a desaparecer...
• ¡¡A la mierda esta gente, a la mierda tus intenciones y a la mierda todos!! - dijo Emma a secas. - ¡No estamos aqui para compadecernos de esta gente! Lo que me faltaba, que la Reyes me diera la charla...
• Ahora has dicho "Reyes"... ¿No crees que eso va a reducir el margen de sospechosos? - dijo Emma Reyes.
• ¡¡Jodete, Reyes!! - grito Emma a secas. - ¡¡Vete a follar con el primer tio que se te cruce y luego dime que tengo que hacer!!
• ¡¡¡Te dire lo que tienes que hacer cuando dejes de TOCARME LOS OVARIOS!!!
• ¡¡¡¡HIJAS DE PUTA!!!!

¡Ostias! Estaba tan pendiente de la riña de las 2 Emmas que no me percate de que un civil mayor y canoso se ponia en pie y disparaba. La bala impacto en la pequeña Emma. La niña abrio mucho los ojos. Bajo la mirada y pudo ver como brotaba la sangre de su estomago.

• ¡¡¡TE DIJIMOS QUE NO INTENTARAN JODERNOS!!! - gritaron Emma Lopez y Emma a secas al mismo tiempo. Acribillaron al heroico civil, sin piedad.

Emma Reyes pego un grito desgarrador, desesperada. Corrio hacia la niña, se arrodillo y la abrazo. A traves de su mascara, se podia ver las lagrimas.

• ¡Reyes, calmate, mujer! - le dije cuando la letrada abrazaba a la niña, que solo parpadeaba y probaba su propia sangre con mucha curiosidad.

Iba a decir algo pero...

BOOM

Los explosivos funcionaron. La detonacion hizo temblar los cimientos del edificio haciendo que un polvo blanco cayera del techo. El sonido irritante de una alarma nos perforo las orejas. Supe entonces que el tiempo se nos acababa.

• ¡Mario! - dijo Emma Reyes, abrazando a la pequeña Emma, mientras la tumbaba en el piso. - Ve tu a la boveda, por favor...

No proteste. La pequeña Emma se quedaria en  el suelo de ese banco, al menos hasta que terminara esta historia. Me ajuste la correa del arma en la espalda y baje hacia la boveda.

Cuando atravese la puerta que da acceso a la escaleras subterraneas, el silencio reino. Baje comodamente, viendo los destrozos provocado por los explosivos. Llegue hasta la boveda. Alli estaba el dinero. Parecian billetes nuevos, porque tenian un plastico encima. Extraje unas bolsas deportivas de la mochila de Emma Reyes y me dispuse a contar y guardar el dinero.

Pasado unos miunutos, volvia sobre mis pasos, cargado con 4 bolsas. Una de ellas, cargadas en mi espalda.

Volvi a la estancia. Algunos civiles estaban desesperados, otros murmuraban.

• He pillado todo el dinero que he podido, pero aun queda algo alli abajo. - dije, dejando las bolsas en el suelo.
• Ya no tenemos tiempo... ¡Vamonos! - dijo Emma Lopez, cargando una bolsa a la espalda.

Iba a decir algo... Pero entonces lo vi...

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Un helicoptero surco los cielos de Madrid. Varios coches policiales aceleraban mientras el sonido de sus alarmas rompian el monotono sonido del atardecer capitalino.  La gente de las calles se sorprendian ver a todo ese escuadron. No solo ellos, ya que los policias que iban a pie tambien se pusieron en marcha.

Varios coches policiales arribaron al banco central de Madrid. Formaron una barrera formada por coches policiales, 2 en forma horizontal y 2 verticales, formando una C invertida.

Unos policias, que acababan de bajar de sus coches, empezaron a despejar a los civiles. Otros colocaron unas barricadas de madera que tenian un letrero:

NO CRUZAR

En ese mismo momento, unos camiones azules llegaron a la escena de los hechos. En el lateral tenian un simbolo: La aguila de San Juan atrapando a una serpiente. Distintos miembros de la GEO españolas salieron del camion y empezaron a tomar posiciones.

• ¡Vamos, vamos, vamos!
• ¡Grupo Alfa! ¡Dirijanse hacia los puntos estrategicos! ¡Grupo Bravo, enfrente de las puertas!
• ¡Adelante!
• ¡Acabemos con esto, tropa!
• ¡Moveos! ¡Moveos!

El helicoptero se estabilizo encima del edificio. Unos hombres se preparaban para invadir el edificio.

Un policia levanto un megafono. Todo el mundo apunto con sus respectivas armas a la doble puerta del banco.

• ¡LES HABLA LA POLICIA! ¡ESTAIS RODEADOS! ¡SUELTEN LAS ARMAS Y SALGAN CON LAS MANOS EN ALTO!

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Entonces lo vi... Un par de coches acababan de arribar a la puerta. Otros mas llegaron, formando una barricada. Empezaron a descender policias.El sonido de unas aspas me hicieron mirar hacia arriba: Un helicoptero acababa de llegar. La sirenas de la policia se volvia cada ves mas fuerte... e insoportable.

• ¡Mierda! - dijo Emma a secas.
• ¿Que hago con el dinero de alli abajo? - dije.
• ¡No hay tiempo, MArio! - dijo Emma Lopez.
• ¡Tenemos compañia, gente! - dijo Emma a secas, levanatando su arma.

Emma Reyes, Emma Lopez, Emma a secas y yo nos dirigimos a la puerta. Nos pusimos a cubierto en los muros que no hacian contacto visual con los policias.

• ¡LES HABLA LA POLICIA! ¡ESTAIS RODEADOS! ¡SUELTEN LAS ARMAS Y SALGAN CON LAS MANOS EN ALTO!

Por esto quise hacer este capitulo. Las Emmas esperaron mi señal. El enfrentamiento debia de empezar... pero me di cuenta que no tenia las granadas que Mario Tunquiri usaba en este capitulo. ¿Como iba a empezar entonces?

Pero mientras pensaba eso, la barricada de coches policiales... exploto.

BOOM

En ese momento no lo entendi. Pero recorde... Esa era la señal de MArio...

MUSICA

La balacera comenzo. Salimos y empezamos a abrir fuego contra los policias. La explosion, sumado al factor sorpresa, hizo que los policias cayeran como moscas. Emma Lopez se puso a cubierto detraz de un arbol, Emma a secas rodo y se deslizo hasta llegar a una papelera. Yo me puse a cubierto detraz del camion de la GEO, que lo habian estacionado enfrente del banco.

• ¡NO VAIS A PODER CONMIGO! - grito Emma Lopez, irguiendose para disparar.

Desde mi posicion, giraba sobre mis talones para disparar y automaticamente me ponia a cubierto. Pude ver a Emma Reyes todavia dentro del banco. Estaba aterrada. Pero no me importo. Pese a ser una historia, senti la adrenalina fluir por mis venas.

• ¡JODANSE! - gritaba Emma a secas, cada ves que derribaba a un policia.

Los policias caian acribillados. Emma Lopez y Emma a secas rapidamente limpiaron la zona de policias.

• ¡Ya esta! - dijo Emma Lopez. - ¡Corran!

Empezamos a correr. Emma Lopez y Emma a secas corrieron por un callejon que estaba adyacente al banco. Emm Reyes cerro la comitiva. Emma Lopez se puso a cubierto en un contenedor de basura y Emma a secas se puso a cubierto en una pared que conducia a otro callejon. Yo llegue y me puse a cubierto en el cemento de una escalera. Enfrente teniamos un coche policial cerrandonos el callejon. Emma Lopez y Emma a secas empezaron a disparar. Yo me encargue de los policias que venian por detras.

• ¡NO PIENSO IR A LA CARCEL EN ESTE PAIS! - dije, gritando. Siempre quise decir eso...

Aparecieron los miembros de la GEO. Estaban en los balcones de las casas. Desde esa posicion, ellos me tenian a tiro pero yo no a ellos. Emma Lopez y Emma a secas pensaron los mismo por lo que se apresuraron a limpiar el frente.

• ¡VETE A CASA CON TUS HIJOS, NO VALE LA PENA MORIR AQUI! - dijo Emma a secas, disparando a un policia.
• ¡EH! - dije yo. - ¡Yo queria decir esa frase!

Emma Lopez y Emma a secas derribaron a los miembros de la GEO, quienes cayeron desde lo alto de los balcones.

• ¡Vamos! - dije, poniendome en pie.

Nos pusimos en movimiento. Al terminar el callejon, habian 2 bifurcaciones. Pero en cada una, un coche policial.

• ¡Separense!

Emma Lopez y Emma a secas fueron hacia la derecha y Emma Reytes y yo hacia la izquierda.

Empeze a disparar. Los policias se pusieron a cubierto. Mis balas fueron todas desperdiciadas.

Justo cuando iba a ponerme a cubierto, se me ocurrio algo: El deposito de combustible.

BOOM

Emma Lopez y Emma a secas giraron el cuello. Delante de mi habia una gran bola de fuego.

• ¡Vamos! - dije. Todas las chicas me siguieron.

Abandonamos ambas salidas y seguimos corriendo. La verdad era un poco incomodo correr con el arma y con la bolsa de dinero en la espalda. Mas incomodo era ponerse a cubierto con todo eso.

• ¡¡¡EH!!!

Las Emmas y yo levantamos la cabeza. Arriba, en el azul del cielo, un helicoptero surcaba los cielos. Era un helicoptero azul con unas letras en el lateral: TVI (Television Iberica xD). Quien pego el grito era el señor Cronopio. Dentro del helicoptero estaban Emma Silverman y Emma Sanatana. Mario Tunquiri conducia el helicoptero.

• ¡La Gran Via!

El helicoptero se alejo cuando nuevos policias arribaron hacia nosotros. Todos nos detenimos y corrimos por otros callejones, algunos tan estrechos para que los coches no pasaran por alli.

• ¡Corran! ¡Corran!

Los miembros de la GEO nos perseguian a pie. Estaban altamente entrenados, los cabrones...

Llegamos a una avenida adyacente a la Gran Via. Anteriormente estabamos en callejones y calles estrechas, pero ahora estabamos en una avenida. Parecian que la habian evacuado de forma improvisada, ya que estaba repleta de coches vacios con las puertas abiertas. Algunas terrazas de bares estaban con las mesas y sillas volteadas. Habia bolsas de compras y de tiendas en el suelo...

Emma a secas se puso a cubierto en una mesa. Emma Lopez se puso detras de la puerta de un BMW y yo me puse a cubierto detras del parachoques trasero de un SEAT.

• ¿Gran Via? - dijo Emma Lopez.
• ¡Hay que llegar a la Gran Via! ¡A la estacion de Metro! ¡Alli los perderemos! - dije.

Otra balacera comenzo.

• ¿¡ES QUE NO PUEDO RETIRAR DINERO SIN QUE SE MONTE EL POLLO!? - grito Emma Lopez, furiosa, mientras disparaba.
• ¡ESTE DINERO ES NUESTRO! - grito Emma a secas.
• ¡NO SOLTARE ESTE DINERO TAN FACILMENTE! - grite, disparando.

Seguimos avanzando. Me sorprendia que Emma a secas fuera tan buena en esto... Emma Lopez era entendible, ya que ella luchaba contra infectados en su universo. Era obvio que me quitaban protagonismo pero no me importaba. Un camion de la GEO se estaciono enfrente nuestro. Emma Lopez, Emma a secas y yo disaparamos conjuntamente. El camion exploto.

Llegamos a la Gran Via. Estaba repleto de coches abandonados. Parecia un laberinto.

• ¡La Gran Via es la Gran Via! - dije, corriendo entre los coches. - No importa el sonido de las sirenas o el olor a polvora en el ambiente...

La policia nos rodeo.

• ¡ Rápido, a la estación!

Emma Lopez y Emma a secas levantaron sus armas, dándose la espalda. Comenzaron a disparar, cubriéndome a mi y a Emma Reyes, quien corría agachada. Entramos a la estacion de metro y ambas chicas nos siguieron. Bajamos las escaleras.

En la estación de Metro se respiraba un ambiente de abandono. Abandono pero no de silencio y soledad. Agudice el oído.

• Cuidado chicas... - dije, agudizando el oído lo máximo que podía. - Aun puede haber...

Y si, había policías. No eran miembros de la GEO, si no policias de a pie. Pero sus pistolas no eran nada contra nuestros rifles de asalto.

• ¡Vamos! - dije, comenzando a acelerar.

Saltamos las barreras de los billetes. Abajo, en los raíles, había mas policías  Emma Lopez se encargo de limpiar la estancia, mientras Emma a secas recargaba su arma.

• ¡Ultimo esfuerzo, chicas! - dije, poniéndome a cubierto.

En los raíles  los anchos raíles y andenes, había policías y GEOs. Emma Lopez se puso a cubierto detraz de la escalera mecánica, Emma a secas y yo nos pusimos detraz de un plano del metro cristalizado y Emma Reyes se cubrió detrás de una papelera.

• ¡¡DEJADNOS EN PAZ!! - grito Emma Lopez, a la ves que derribaba a un par de policias.
• ¡¡NO CREO QUE QUIERAS MORIR POR UN BANCO!! grito Emma a secas, disparando.

Cuando el ultimo policía cayo acribillado, salí del lugar de protección.

• ¡A las vías del tren! ¡RÁPIDO!

Emma Reyes salto conmigo. Pero Emma Lopez y Emma a secas me miraron raro.

• ¿Pero como vamos a saltar a las vías del metro? ¡Nos vamos a electrocutar! - dijo Emma Lopez.
• ¡Tu solo sígueme!

Todos saltamos a las vías del tren. Nos adentrábamos a la oscuridad. Justo cuando empezamos a andar, escuchamos una explosión  La explosión había ocurrido detrás de nosotros. Los cimientos se derrumbaban. Supe que era un regalo de Mario Tunquiri.

• Ya esta... No creo que nos sigan...

Comenzamos a trotar. La aventura había sido emocionante, pero ya me empezaba a cansar. Emma Lopez tenia la lengua fuera, Emma a secas sudaba y Emma Reyes estaba muy callada. 

El silencio, después de un buen rato con las sirenas de los coches, disparos y explosiones en nuestros oídos  reino. La oscuridad hacia que forzara los ojos al máximo. Solo escuchaba el trote de las Emmas.

• Podías haber mezclado mejor el explosivo, ¿No, Reyes? - dijo Emma Lopez, trotando.
• ¡Y ustedes podrían haber vigilado mejor! La nena debería estar con nosotras... - dijo Emma Reyes.
• ¡La pequeña tuvo mala suerte! Nadie tuvo la culpa de nada... ¡Y el explosivo hizo su trabajo! - dije, gritando. - ¡¡Callaos ya la puta boca!!

Seguimos avanzando. Sentía los raíles debajo de mis zapatos. Me preguntaba si los trenes funcionaban todavía.

• ¡Alli! ¡Mirad! - dijo Emma Lopes, señalando al frente. - ¡Una escalera de servicios!

Lo vi. La escalera estaba débilmente iluminada por unos focos.

• ¡Vamos, vamos, vamos!

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En la salida del servicio, que daba a una calle, arribábamos todos. Las Emmas y yo. Cuando salimos, pudimos escuchar el sonido de las sirenas de los coches policiales. Pero ahi estaba Mario Tunquiri, en un coche 4x4 esperándonos.

• ¡ Rápido! - dijo, abriendo la puerta.

Las Emmas y yo nos metimos en el coche, dejando las bolsas en el maletero. Mario Tunquiri subió los cristales polarizados y acelero.

Los coches policiales aparecieron por la retaguardia. El 4x4 acelero mientras esquivaba los disparos de lo policías  Un helicóptero apareció por encima de los edificios y empezó a seguir al coche. La policía emprendió una persecución por las calles. Algunos policías  que estaban por las calles, dispararon al coche en marcha.

El helicóptero surcaba los cielos. El coche entraba por calles, esquivando los coches como podia.

Pasado unos minutos de persecución, salieron a las autopistas. De las ventanillas del coche, salieron pequeñas bombas que explotaban por la carretera. Esto hizo que la policía retrocediera. Pero no iban a perder al coche, ya que el helicóptero los seguía por el aire. En una de esas, el helicóptero surco el cielo, atravesando un puente, justo en el momento en que el coche 4x4 pasaba por debajo del puente. El piloto del helicóptero hizo unas señas a sus ocupantes y se encontraron en terreno despejado. Empezaron a acribillar al coche.

Los policías volvieron a aparecer, esta ves por adelante. El coche 4x4 dio un giro brusco y los esquivo. El helicóptero estaba agujereando el capote del coche, incluso le disparaba directo al conductor.

La sangre manchaba los cristales del coche, pero este seguia acelerando.

El 4x4 descarrilo a varios coches policiales, uno de ellos se estampo contra una gasolinera, haciéndola volar por los aires. 2 coches policías cerraron al 4x4, haciendo saltar chispas de su capo. Los policías disparaban, intentando romper los cristales polarizados. La persecución se estaba alargando mucho, ya que los el coche no se detenía para nada, pese a estar acribillado hasta decir basta.

Un camión de la GEO se cruzo de forma bestial. No solo impacto al 4x4 sino también a los coches policiales. El 4x4 dejo de moverse, quedándose estático. Tenia un estado lamentable, lleno de agujeros de bala y manchas de sangre.

El helicóptero se detuvo encima del coche. Varios policías bajaron de sus coches. Todos desenfundaron sus armas y apuntaron al coche. Un miembro de la GEO se acerco... espero... y abrió la puerta del coche.

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En el barrio de Aluche, en el 6B, Mario Tunquiri cerraba un ordenador portátil.

• Han picado... todos... - dijo el chico, sonriendo.

Yo me rei. Había sido algo tan simple, como hacer un cambiazo de coche debajo de un puente.

• Bueno, yo me tengo que ir... - dijo Mario Tunquiri.
• 200 millones... - dijo Emma Reyes. - ¿Te imaginas cuantas familias podían salir adelante con ese dinero?
• Lo curioso, Emma... - dije, dirigiéndome a Emma Reyes. - Es que la Lopez y Emma a secas se quedaron casi sin munición... Yo también quede escaso... ¿Pero tu? Apenas gastaste un cargador...

Emma Lopez y Emma a secas estallaron en carcajadas. La pequeña Emma estaba sentada encima de la mesa, bebiendo un zumo.

• Oye, Mario... - dije, dirigiéndome a mi homónimo. - Gracias tio...
• De nada... Ha sido divertido... Gracias a ti por haberme creado tal y como soy... Supongo que todo personaje debe estar agradecido a su creador... Excepto Gregor Samsa...
• Creo que nos volveremos a ver, ¿no? - dije.
• Si... Creo que has planeado una edición especial de las Tradiciones de G/Cinthia, ¿no? - me dijo Mario Tunquiri.
• Exacto... - dije, tomando un sorbo de un vaso de agua y quitándome la chaqueta. - Pero seré yo quien os cuente un cuento...

Mario Tunquiri salio de la estancia. Me quede mirando a ese tio... Deseaba ser como el...

• Bueno, Mariete... Esto ha sido divertido... Pero ahora toca mi universo.. - me dijo Emma Lopez.
• No, tia... Estoy un poco cansado... ¿Que os parece si vamos primero al universo de Emma Silverman? - dije, mirándola.
• ¡¡¡SI!!! - dijo la pequeña Emma, saltando. - ¡La tita Emma tiene panchitos!

Emma Lopez agacho la cabeza.

• Venga, Lopez... Te prometo que tu historia sera increíble  llena de muchos zombies... tanto zombies normales como especiales...

Emma Lopez sonrió.

Continua en El divan de Emma Silverman - Edicion Especial (Primer "Aniversario")

Thats Special Someone - Edición Especial (Primer "Aniversario")

• Así que... primer aniversario... - me dijo Emma.

Nos encontrábamos en una estancia oscura. No se podía ver nada, excepto a Emma y una mesa iluminada. Encima de la mesa había un tablero de ajedrez. Emma me miraba fijamente. Detrás de esas gafas, sus ojos color café pardos parecían querer leerme la mente.

• Alguna ves... tuve un blog. No como la Reyes, ni como la Lopez... Pero si tenia un blog... - dijo Emma, sirviendo 2 vasos con agua. - Hace bastante tiempo que no me escribes. Empezaste con un par de cartas y luego desapareciste.

Al decirme eso, pensé que tenia razón.

• Digamos que me entretuve con otras historias. Todavía tengo el borrador de la carta que te iba a mandar...

Emma movió un peón blanco. En la oscuridad de la sala, no se podía ver nada... al menos yo no podía ver nada. La verdad, verdad de la buena, veía todo eso un poco... inquietante.

• ¿Que pasa, Mario? - me dijo Emma. - ¿Porque me abandonaste?
• Supongo que algunas ideas, que a mi gusto eran buenas, me inundaron la cabeza... - dije, moviendo un peón.
• Me duele, ¿sabes? Yo... pensé que era mas importante para ti. Fui la primera Emma, fui la representación de tu conciencia... Te hacia ver tus errores, te hacia ver el lado bueno de la vida. Muchas veces me ignorabas, lo cual era curioso, ya que era ignorarte a ti mismo... 
• Perdóname, Emma... Soy un joven al cual busca un poco de libertad y un poco de perseverancia en esta vida.
• At... at... ¡Atchis! - se pudo escuchar el estornudo de la pequeña Emma.
• Shh... - dijo Emma, pidiendo silencio.
• Toma, Emmita, límpiate con esto... - dijo la voz de Emma Reyes en la oscuridad.
• Shh... - dije, pidiendo un poco de silencio.
• A lo que íbamos... - dijo Emma, moviendo un alfil.
• Cuentame tu, Emma... - dije mirándole  - Hace tiempo te di libertad plena... Te di libre albedrío en mi mente... Te di personalidad... te di libertad... te "humanice"...
• ¿Yo? Pues estaba sola, Mario... - me dijo Emma. - Veía como imaginabas historias y mas historias... Episodios desde Madrid, Inmortales, el divan de Emma Silverman, Emma y Emilio venganzas a domicilio...
• Lo siento... - dije, sintiéndolo e imaginándome la vida de perro solitario de Emma.
• No... no... ¿Sabes porque? Porque aprendí de tu personalidad... Aprendí y valore la soledad, el silencio, la oscuridad... - me dijo Emma.
• ¿De verdad? - dije, moviendo un caballo.
• Si, Mario... Ahora cuéntame tu...
• ¿El que? - le dije, mirándola.
• No se... - dijo Emma, de forma picara. - Todo... ¿Serias capas de recordar toda tu vida?
• Hombre toda, toda... No creo...

Emma me miro con una sonrisa. En el fondo era guapa... ¿¡Pero que coño!? ¡Que no, que no, que ni de coña! Emma era fea, puaj, fea, fea...

• ¿Sabes que puedo leerte la mente? - dijo la voz de Emma en mi cabeza.
• Lo que me faltaba...

Me quede pensativo. Una cosa era recordar cosas que te pasan hace años y otra es toda tu vida.

• Mi vida empezo de una forma... curiosa. Lo maxio que recuerdo era que una tarde, me desperte en la cama de mis padres... Asi, sin mas... La estancia se encontraba oscura... Años mas tarde, reflexione si recordaba algo posterior a eso... Tenia 4 años cuando paso eso... No recordaba nada... Osea, nada anterior a eso... Me acuerdo que vi a mi madre y fue como ver a alguien por primera vez. Mi padre llegaba ese momento a casa. Habia otro chico mayor que yo y supe que era mi hermano... A veces, cuando recuerdo esto, me pregunto porque me parecio todo eso un poco raro... - dije bebiendo un vaso de agua. - Mi madre me mostraba fotos y no enetendia como en esas fotos estaba sonriendo y aparentaba ser feliz... y no recordaba todo eso.
• ¿Sabes que eso me da miedo? - dijo Emma, sonriendome.
• ¿Porque? - le dije, sonriendo tambien.
• Das a entender que antes de ese momento que despertaste, es como si fueras otra personas y despues de despertar, fueras tu. - dijo Emma, sonriendo.
• Si, ¿verdad? Llegue a pensar eso alguna vez...
• Entiendo... - me dijo Emma.

Se escucho un sonido curioso.

• Tita, tengo hambre...
• No, ahorita no, cariño... - dijo la voz de Emma Reyes. - Tendras que aguantarte...
• ¡BUAH! 

Joooder... Me toque la parte superior de mi nariz, la parte que hay entre los ojos, intentando ser paciente.
Emma suspiro...

• Shhh, por favor cariño... - dijo la voz de Emma Reyes. - Toma, sacate unas patatas de la maquina...

Se escucho el sonido d euna cartera abrirse y luego a alguien correteando por la estancia...

• ¿Podemos continuar? - dije, sin perder la paciencia.
• A lo que íbamos... - dijo Emma.
• Paso el tiempo y seguí como siempre. Al día siguiente, mi padre me enseño a leer. Me enseño gracias a un libro llamado Coquito. Era el típico libro infantil. A mi me pareció estúpido, con esos dibujitos y demas cosas...
• ¿Si? A mi me pareció adorable... - dijo Emma, moviendo una pieza.
• Paso el tiempo y ya iba a preescolar. Me veía estúpido con el uniforme de niño. Me acuerdo que tuve mi primer amor: Se llamaba Estrella. ¿Sabes? Era una chica bonita, simpática, cabello caoba rizado...

Emma abrió los ojos, sorprendida. Se paso la mano por su cabello caoba rizado.

• ¿Nunca te diste cuenta? - dije, mirándola y comiendo un peón  - Tu, Emma, la primera Emma, eres un conglomerado de varias chicas que alguna ves me gustaron, físicamente hablando. Tu cabello es como el de Estrella, mi primer gran amor infantil. Tus ojos son como los de Rocio, un amor en 3º de Primaria. Tu nariz, redondeada, es como la de Lidia, el amor de 6º de Primaria. Tus orejas son como Sibyl, mi amor de Secundaria. Tus gafas son como los de Lisa, mi primer amor ibérico  Y por ultimo, tus labios son como los de Andrea, mi ultimo amor ibérico  Y claro, tu nombre es de mi amor platónico  Aquella actriz de TV cuyo nombre real ignoro...
• Vaya... - dijo Emma, sonrojada.
• Así es pues, primera Emma - dijo, sonriendo. Moví una pieza. - Obvio que físicamente no exagere contigo. No eres alta como la Reyes ni voluptuosa como la Silverman... Eres especial. Y eso me gusta...
• Bueno, me estas asustando... - dijo y movió una pieza.
• ¿Porque todas las chicas a las que les digo que son guapas, en el mas estricto buen sentido de la palabra, se asustan? - dije, indignado.
• No se... Tienes una cara de: "Te voy a meter de todo menos miedo" - dijo Emma, moviendo una pieza.
• También es verdad... No tengo la culpa de que mi belleza mande ese mensaje... - dije, sonriendo.
• ¿Belleza? Por favor... - dijo Emma, irónicamente
• Pues si... ¿Que pasa? ¡Porque yo lo valgo!

Emma me guiño el ojo.

• A los 5 años empece el colegio. Conocí a mi primer profesor: El profesor Carlos. Fue profesor de mi hermano. Ese año empece a distinguir el colegio del preescolar. Ahora teniamos clases y nos mandaban tareas. Pero aun asi era interesante. Ese mismo año, me acuerdo que estaba en el recreo... y me cai por las escaleras, partiéndome la cara por todos lados... - dije.
• Con razon, asi has acabado...
• Te he oido... - le dije a Emma.

Movi una torre.

• Cuando cumplí 6 años, estaba en segundo año. Ese año paso algo curioso: Me presente a un concurso de matemáticas y, para mi, lo di un poco mal. Pero como fue mi sorpresa cuando gane. Me dieron un diploma muy bonito ante todo el colegio. Allí empezó mi fama de buen alumno. Fama que creo que no me gustaba para nada.
• ¿Si? - pregunto Emma.
• Si...

Tome aire.

• Si te soy sincero, 7, 8, 9 y 10 años pasaron sin grandes cosas, salvo que a los 9 años mi madre viajo a España. Es a la edad de 11 años que pasaron cosas importantes en mi vida.
• Cuéntame... - dijo Emma, moviendo una pieza.

Tome agua. Estaba fresquito.

• Año 2005, mes de Agosto. Fue por fin cuando viaje por primera ves a España.
• Oh si... - dijo Emma, suspirando.
• El barrio madrileño de Vista Alegre fue mi primer hogar. De hecho, algún día viviré allá, me lo he prometido... - dije, recordando.
• ¿Que si? - me pregunto Emma, comiéndome otro peón.
• Si... Recuerdo que mi madre preparo pescado frito, pescado español, preparado solo con sal y pimienta...Jum - dije, recordando. - Que bueno que estaba...
• Joe...
• En serio... Repetí hasta la saciedad. Recuerdo también que luego salimos a pasear con mi padre y madre. Madrid me pareció un poco... gris. Los escaparates de las tiendas me parecían sosos. Los bazares apenas tenían pergolas de colores o anuncios. Los edificios eran todos de un tono naranja, blanco o gris. Pero me llamo la atención las formas de vida. Gente tendiendo las ropas a vista de todos, gente desayunando en bares entre whiskys y vinos... ¡EL METRO! Joder, que flipe cuando lo tomamos para ir al barrio Aluche...
• Pareces el estereotipo del inmigrante que recién llega a España...
• Es que lo era... Todo eso, el supuesto primer mundo, me parecía nuevo. Claro que pensaba que lo de Perú era mejor que el "Spanish way of life" pero allá cada uno con su punto de vista. Me sorprendía ver gente de todo tipo: blancos, negros, chinos, moros, etc. Madrid... me parecía interesante... no me parecía bonita sino interesante.

Emma me sonrio.

• Pero fue una lastima que solo estuviera unos días .. ya que nuestro destino final era un pueblo llamado Valdeolivas. Me acuerdo que nos fuimos a la estación de Mendez Alvaro, donde tomamos el autobús que nos llevaría a la serranía de Cuenca.

Emma hizo un enroque.

• Así que ahora empieza lo bueno.

Sonrei. Sabia a que se refería.

• Llegamos al primer año en Valdeolivas y el primer año en España. Empece el insti y empezó lo bueno. Tenia 11 años cuando subí a esa furgoneta que nos llevaría al Carrillo de Mendoza. Por cierto, el instituto debe su nombre a un noble español. Cuando tuve Internet, me di el lujo de averiguarlo. El caso era que yo era un chico moreno, gordo, con un chandal azul marino, que llego temprano a su clase. Me sente al final de todo la clase y de primera me senti a gusto: Un olor a limpiasuelos, un olor a cafe recien hecho y un calorcito del radiador. Me llamo la atencion las chicas
• Enfermo...
• Joe, eran distintas a las que habia visto hasta esa fecha. No eran bajitas, morenas y un poco... feas. Eran altas, delgadas, blancas... pero igual no eran bellezas. Pero aun asi me llamo la atencion...
• Pff...
• ¿Que esperas? Era un tio...
• ¿Y que paso?
• De primeras unos chicos vinieron a verme... Supuse que no veian muchos inmigrantes... Habian de todo tipo...
• ¿Y que sentiste?
• ¿Yo? Nada... Veia a eso muy raro... La clase que empezaba era ingles, a cargo de una profesora rubia un poco mayor... Me acuerdo que usaba un metodo curioso: Todos tenian un cartel con su nombre encima de la mesa...

Emma rio.

• Mi primera tutora era la profesora Montserrat... o Montse, como le decian... Estaban varios profes: Don Angel, Doña Puri, Jose Roberto, la hija puta de Marimar, etc. Habian 2 profes de ingles: Una rubia que me enseñaba a mi y un calvo que una ves escuche que se puso a llorar en plena clase...
• Vaya... Que cabrones, ¿no? - dijo Emma.
• Ya te digo. Pero tambien era otro sistema: No era como Peru, que son clases dictatoriales. Aqui, España, los profes se les llamaba por su nombre y tenían mucha confianza con los alumnos. 
• Mmm... - dijo Emma.
• Llego el recreo. Como era nuevo, lo que hice fue ir a ver jugar a los chavales. Habían unos que jugaban de puta madre. Había otros que jugaban basquet y otros que directamente jugaban con un cigarro en su boca.
• Supongo que no eras muy sociable, ¿no? - dijo Emma.
• Te sorprendería saber... que mientras estaba sentado, pelandome de frió  un grupo de 3 chicas vinieron y se sentaron conmigo...
• ¿ Perdón? - dijo Emma, sorprendida.
• Nunca supe si lo hacían en plan vacile o de verdad querian hablar conmigo... Eran de cuarto de la ESO. 2 eran rubias y la otra era morena...
• Tu sueño, cabrón...
• "of course, honey" - dije, en un falso tono ingles. - Fui un idiota. Me hice el llanero solitario... Ahora me arrepentía .. Perú no es como España. Aquí  en la madre patria, necesitas amigos. Si no, la pasas mal. Fatal... Muy mal... Y no, obvio..
• ¡¡Venga ya!!

Ambos nos reímos.

• Bueno, en clase también habían chicas: Elena, Nuria y Lisa. Elena estaba buena, Nuria estaba "fuerte" y Lisa era la menos curvilínea pero era quien me gustaba mas de todas. Se parecía a...

Enmudecí. Me daba corte decirlo.

• ¿Que? No entiendo... - dijo Emma.
• Veras... - dije, intentando que el rostro no se me sonrojara. - Yo escogi Frances como optativa. Un dia antes de empezar las clases, me quede toda la tarde leyendo los libros. El de Frances tenia una estructura simple: Cada capitulo empezaba con una conversacion de audio que te introducia en el tema. Las conversaciones eran entre 2 amigas: Christine y Chloe... Me enamore de Christine y de su voz. Me parecia muy sexi. El tema es... que cuando fui al insti... ¡Sorpresa! Lisa se parecia bastante a ella...
• Buah... - dijo Emma.
• ¡Para mi, obviamente! Quiza para el resto no, pero para mi era igualita. Pero no solo fue eso. Si no el hecho de que Lisa era la tia mas inteligente de mi clase. Del 9 no bajaba y eso hizo que me gustara mucho mas.
• Estas muy mal, Mario... - me dijo Emma. - ¿No intentaste acercarte a ella?
• Claro que si... Pero Lisa tenia un "escudo"
• ¿Que? - dijo Emma, sin entenderlo.
• Un "escudo"... Se llamaba Puy Martinez
• ¿Quien? - dijo Emma, moviendo la reina.
• Una niña con nombre catalan... Que no veas como me tocaba los huevos... Creo que le gustaba

Emma estallo en carcajadas.

• ¿En serio? - dijo Emma.
• Si... No encuentro otra explicacion para eso...
• "Pobechito" - dijo Emma, falsamente.
• Puy tenia a su hermano, Urko. Que tio mas raro... pero fumaba como una chimenea. Y Urko tenia a su colega: Mendieta. Le decian Mendi, obviamente. El caso era que Puy nunca dejaba a Lisa sola... Era tonta, jodida, un poco marimacho... pero lo curioso era que en tercero...
• ¡No me lo cuentes! - dijo Emma. - Vamos año por año, por favor...
• Vale... - dije, sonriendo. Le comi un caballo.
• Sigue... - me dijo Emma.
• El caso es que el grupo era ese. Estaban los de Villaconejos, que eran muchos. Entre ellos Pablo, Lucia, Alicia y demas que no me acuerdo su nombres. Lucia Cobollo...
• ¿Que pasa con ella? - dijo Emma.
• Digamos... - dije, rascandome la barbilla. - Que fue mi primer "archienemiga"
• Venga ya tio... - me dijo Emma, sin creerselo.
• Es broma, obvio. No le guardo ningun recelo. Pero el caso es que le parecia gracioso vacilarme o algo por el estilo. Quiza ella no lo vería asi pero molestaba un poco...
• Pff... - dijo Emma.
• Asi estaba la cosa... - dije, sonriendo. - Estaban chicos de otros pueblos como Albendea, Salmeroncillos, etc.
• Joe... - dijo Emma, moviendo otra pieza.
• El primer año no paso con grandes aventuras que digamos. Me pelee con algún macarrilla pero nada serio.
• ¿Si? ¿O es que no lo quieres contar?
• Digamos que tuve problemas, pero ya pasaron... ¿Que puedo hacer? Me molestaba y ¿que?. Yo era feliz, pese a que había días que volvía a casa llorando. Pero al día siguiente me preparaba para mi siguiente aventura.
• ¿Que tal los profesores?
• Bien, también... Don Angel, el de matematica, se gano mi respeto. Era el único  junto con Doña Puri, a quien los macarras no faltaban el respeto. Supongo que su carácter sumado a su presencia les imponia.... Estaba tambien Jose Roberto, el de tecnología  Era un buen tio... Marimar, la de Frances... Parecia una diva al caminar... A veces me dio la sensación de que veía a los demás profes por encima del hombro... Aurelia, la de música... Buah, Aurelia... - dije, recordando.
• ¿Que pasa con ella? - dijo Emma.
• Que vocecita que tenia...
• Pfff...- dijo Emma.
• Por ella aprendi a valorar la música  Adoraba sus clases, por las tardes tocaba mi flauta solo para luego en clase tocarla bien y que me felicitara...
• Jajajaja - se rió Emma, moviendo una pieza. 
• El primer año paso... Sobreviví... Era lo que importaba...
• ¿Sin muchas novedades? - dijo Emma.
• Si... Es en el segundo cuando empiezan a ver nuevas novedades y en el tercero cuando me pasan mas cosas.

Emma espero a que terminara de beberme mi vasito con agua.

• Llegamos al segundo año. Doña Puri se fue y llego un profe un poco ojon llamado Ramon, tambien de letras. Era el típico listillo que dictaba la clase apoyado en la mesa. En el salon habia menos alumnos pero seguían los de siempre. Digamos que en este año lo pase mal porque no solo me jodian en el instituto, sino también en al autobús  Un bulgaro que no veas como jodia... menos mal que al final se aburrió porque ese tio se parecia al ruso de la pelicula de Rocky.
• Joder... - dijo Emma.
• Los recreos las pasaba en la biblioteca... Alli conoci al hermano de Lisa: Gabriel. Y a su amiga que estaba mas buena que el pan: Ana, la rubia. Ellos iban a la biblio para charlar con el profe de turno y de ves en cuando me miraban cuando yo escogia un libro. 
• ¿Asi? ¿Los mirabas tu o...? - pregunto Emma.
• No... los espiaba. A traves del reflejo de los cristales.
• Que cabron... - me dijo Emma.
• Ya... el caso era que en segundo, a mediados del segundo trimestre, tuve mi primer colega-
• ¡Guau! - dijo una voz en la oscuridad.

Aplausos...

• Que pelota eres, Reyes... - dijo Emma, de mala ostia.
• Si he sido yo... - dijo la voz de Emma Lopez.
• Se llamaba... - dije, ignorando a las Emmas. - Carlos Carralero. Era de cuarto de la ESO y de Villaconejos. Todos los recreos nos encontrábamos en el radiador del primer piso y charlábamos  Y todo porque me presto un videojuego.
• Otro friki... - dijo Emma.
• Acertaste. Era alto, flacucho, un poco narizón y con gafas. Gracias a el, dio comienzo a lo que llame a una etapa de mi vida. El segundo año lo llame: "La saga de Villaconejos"
• ¿Saga? Debes dejar de ver Dragon Ball Z, Mario, te esta jodiendo el cerebro... - dijo Emma.
• Si bueno... El caso es que lo llame asi porque ese año me relacione con ese pueblo de muchas formas. Ya no la pasaba en la biblio, si no en el primer piso, hablando y charlando como una persona normal. Desde alli empece a ver a todo el mundo. Me sentia bien... Y me di cuenta que auqnue Carralero no era el mas popular, las hostilidades hacia mi persona cesaron. Cesaron pero no capitularon. Aun asi, fui feliz. No tanto porque en el primer trimestre suspendi 2 cursos... Bueno, no hacia falta decir que mi madre mi castigo duramente. ¡JA! En el segundo trimestre saque mi mejor promedio. 10 en Mates, 9 en Tecno y en los demas cursos 8... excepto en Educacion Fisica, que saque un 7. ¡Un jodido 7! Para mi era otro 10...
• Pff...
• La saga de Villaconejos llego a su fin sin pena ni gloria. Me despedi de Carralero y disfrute de las vacaciones.¡ Atención! Ese verano acudi a las fiestas del pueblo de Priego pero porque mi hermano tenia sus amiguetes.
• ¿Que paso? - dijo Emma.
• Pasaron cosas... Cuando iba por las calles, buscando puestos de comida, me parecio... Osea, via a vria gente, lo que era normal en esas fiestas... Viejo, viejas, señores, señoras, chavales... Pero tambien vi a 2 personas... que en ese momento no me parecieron raros...
• No entiendo... - dijo Emma. Me hizo Jaque.
• Mira... Yo se que no he nacido en Priego. No tengo familia alli ni se me ha perdido nada en ese pueblo... pero siento que estoy conectado, en cierto modo. Yo tengo esa perspectiva. Uno nunca sabe si una persona que mira de pasada... pueda volver en un futuro y escribir un capitulo en tu vida. La gente sale a la calle y ve pasar a gente sin nada mas que le importe. ¿Que me dirías si esa persona que paso a tu lado, puede aparecer mas adelante? - dije. - El caso era que... juro que me cruce con un chaval alto y flacucho... y que cuando ya tenia mi perrito caliente en la mano, choque con una chica delgada y de cabello marron. En ese momento no le di importancia... ¡Cuandofue mi sorpresa cuando en Alcala, conocí un chico que me hizo sentir un terrible DejaVu al verlo! ¡Y lo peor, que años mas tarde, una novia de el tambien me hizo sentir un DejaVu! Me llamo bastante la atencion...
• ¿David... y Bea? - dijo Emma.
• Exacto. Se que me tomaran por locos... Pero juro que me cruce con ellos en el verano del 2007. Yo estoy 100% seguro. Con Bea no tuve oportunidad de preguntárselo pero a David si que le dije, en plan policia: ¿Que hacias en el verano del 2007? No me contesto... solo me dijo que no se acordaba. Caso cerrado. No insisti.
• Vaya... 
• ¿Ves porque digo que me siento conectado a ese pueblo? No solo ellos 2... En verano del 2008, la ultima chica que hable antes de irme para siempre... es una chica con la que hablo ahora... Aunque ella diga que no se acuerda... Entiendo eso. No era yo alguien importante en ese momento. En ese momento, yo solo era un desconocido que se cruzo en su camino y hablamos por menos de 15 minutos. Asi que era entendible que se olvidara. - dije, sonriendo.
• Vaya... - dijo Emma.
• Llegamos al tercer año... "La saga de Priego" ¿Porque? Por que fue en este año donde mas contacto tuve con la gente de ese pueblo... Gente que iba a mi clase, obvio. Pero antes, te contare como estaba el panorama de profesores después de la saga de Villaconejos.

Tome aire y bebí agua. La partida estaba a punto de acabar.

• Jose Roberto se volvió director, cosa que me sorprendió porque pensé que seria Don Angel. El me enseño Fisica y Quimica, cursos molones a cargo de el. Matematicas me toco una profesora pelirroja cuyo nombre no me acuerdo. Y también llegaron nuevos profesores... Rafa, el profe altazo de biología que se parecía a Tarzan. La "Barbi", una rubia que era la psicóloga  Ramon, el de música  Se hizo famoso por estar loco y una frase: "Que chuli". Un profe de Tecnologia que era un forofo del Barza y un buen tio. Una vieja culona que enseño Sociales. Lorena, la profe rubia de bote que enseñaba Lenguaje. Y Mabel, la profesora de ingles. Una "3 cabezas" - dije, sonriendo.
• Enfermo... - dijo Emma.
• Rafa, la Barbi y Mabel siempre andaban juntos. Algún momento pensé que quizá se montarían un trió de la conchalamadre.
• ¡¡Joooooder!! - dijo Emma, indignada.
• En serio... Mabel era Mabel...
• Jajajajaja
• Eso fue respecto a los profesores. En clase también hubo cambios. Rafa, nuestro tutor, hizo cambios de sitio. Y a mi me sentó detrás de Puy Martinez y al lado de un chico. Se llamaba Samuel Cuquerella. Vaya cuadro... Y no solo eso... El clan Cobollo aumento a 2 porque el primo de Lucia, Carlos, repitió de año y ahora estaba en mi salón  Pero fue este año donde hice las pases con Puy. Quizá porque charlaba mucho con Samuel que hicimos tontería y media. De Samuel aprendí las cosas malas buenas de la vida.
• ¿Malas buenas? ¿Como es eso?
• Cultura general de la vida: Hacer un porro, a hacer yeso cacero, curar pequeñas heridas con útiles escolares, chuletas ingeniosas, separar cannabis, preparar la base para una pipa... - dije, enumerandolos con los dedos.
• Pff...
• Y lo mejor... Al estar siempre con el, Puy tuvo que capitular sin condiciones. En ves de decirle que vaya donde ella, era ella quien venia a nuestra carpeta. Gracias a ello, me entere de varias cosas de los demas... De la vida de los profesores, de los líos de faldas de los chavales, etc. Incluso, al estar Puy siempre en mi sitio, Elisa vino también  Recuerdo una clase en la que estaba sentado con el grupo de Elisa. No decia nada ni opinaba pero estaba allí  ¡Estaba allí  joder! Era como España en la cumbre del G20. No tenia ni voz ni voto pero estaba allí...

Emma rio. Me empezo a ganar la partida.

• Tuve problemas con Carlos Cobollo. Le parecía gracioso molestarme, lanzarme bolitas de papel, picarme... No me importo eso en su momento... pero llego a colmarme la paciencia. Casi llegamos a las manos. Una clase EF, le insulte y el me quería contestar pero parece que lo detuvieron... Pero paso el tiempo y tuve la oportunidad de vengarme. Cuando estábamos dando un examen de Física  el estaba detrás de mi. Me pidió ayuda... y se la di. 

Tome agua. Emma me fulmino a la reina.

• Saco un 8, el cabrón y yo un 7,6. No veas que alegría  Me abrazo y no para de celebrarlo. Incluso, se lo dijo a su prima y le pareció increíble  Lucia no paro de mirarme. Supe entonces que las hostilidades hacia mi persona habían acabado. Era lo que mas deseaba. Lo volví a ayudar en su recuperación  Digamos que fue un final peliculero: De hostilidades a llamarme por mi nombre y charlar conmigo. Digamos que hice lo correcto.

Emma me sonrió picaramente. Me fulmino la torre...

• Aparte de todo eso, hice 3 colegas nuevos. Un "Cartman" llamado Agustin, un chaval pequeño llamado Gustavo y Gonzalo. Eramos todos unos putos frikis, pero eramos felices en nuestro mundo. Supongo que mi grupo era... "especial"
• Y tanto...
• Ese año también me gusto mucho, aparte de Lisa, una chica que mencione antes: Nuria. Siempre me trato bien e incluso una vez... Estaba ella con su novio, Paquito, en el mismo sitio donde estábamos Gonzalo, Gustavo, yo y Agustin. Vino un típico macarrilla a jodernos y nos empezó a molestar. Y Nuria le dijo: "¿Es que no tienes nada mejor que hacer, gilipollas"? - dije, simulando la voz de una chica enfadada. - ¡El macarrilla se quedo callado y con cara de tonto! ¿Que podía hacer? Paquito Lara era un tio alto, atlético y era muy "popular" entre todos. Si el macarra contestaba, estaba seguro que le iba a caer mas mierda encima... - dije, haciendo un gesto con la mano. - Alli me di cuenta del poder de tus influencias en ese instituto. Yo tenia la de mi hermano y nada mas. Pero ese pequeño gesto de Nuria me hizo volver a confiar en el genero humano. 
• Vaya... - dijo Emma.
• Ademas que ya la admiraba por otras cosas como por ejemplo... Ser una chica que jugaba al futbol mejor que muchos chicos. Cuando me tocaba jugar, era imposible pararla... Obvio que no le iba a hacer falta... 
• ¿En serio?
• Si... - dije. - Asi fue el tercer año. El ultimo dia, supe de 2 cosas que nunca llegue a confirmar: Que Gabi estaba con la rubia Ana (Puta envidia...) y que Lisa estaba con un tal Juanra, un chaval colorado. Pero no me importo, ya que supe que mi ciclo en ese instituto había acabado. Me iba a ir a Alcala y eso era lo único que importaba. Mientras salia el ultimo día, me cruce con 2 chicas. A una la conocía  Se llamaba Miriam y era de Valdeolivas. La otra chica no sabia quien era. Era joven... pero tenia algo curioso: La frente se le arrugaba mucho. Eso le daba aspecto de persona mayor. Llevaba gafas, una camiseta roja y vaqueros. Como conocía a Miriam, me puse a andar con ellos. La otra chica se puso a hablar de... cabezas rapadas, nazis y racistas. Me quede sorprendido, por un momento pensé en retirarme pero... "para un listo, hay otro aun mas listo". Así que me puse a hablar todo lo que sabia acerca del tema. A la chica esa le sorprendió ..pero yo ya no tenia mas tiempo.  Me despedí de ellas y me fui hacia el paradero. Ellas siguieron el camino. ¡Quien me iba a decir que mas adelante, esa chica volvería! Que cosas tiene la vida...

Emma hizo Jaque Mate. Me senti un poco alegre de que aquella partida llegara a su fin.

• Te contaria mas, sobre todo de mi ultimo año en España... pero esa historia esta "datada" en muchas personas. Si me centre en esos 3 años es porque nadie sabe mucho acerca de ello. Esos 3 años nadie conocia a Mario Sergio Condori. O quiza si, pero pocas personas. Fue una etapa muy bonita de mi vida... - dije.
• Pero si te marginaban.. - dijo Emma.
• ¿Y? Descubri la vida tal y como es. Descubri el amor, la confianza, las esperanzas puestas en otra personas, amistad, etc. Te juro que si me dieran la oportunidad, lo volveria a vivir...
• Vaya...

Se escucharon aplausos. La luz volvió a la estancia. Alli estabamos... Las Emmas y yo. La pequeña Emma comia una bolsa de patatas fritas...

• Gracias, gracias...

Emma Reyes me dio un beso en la mejilla. De verdad, que pelota que era la tia... Pero como estaba buena, no dije nada...

Emma a secas se me acerco. Me golpeo en el estomago.

• Escríbeme, cabrón... - me dijo, a la ves que me enderezaba.
• Lo haré... Si me golpeas así, lo haré...
• ¿Tita? - dijo la pequeña Emma.
• Bueno... y ahora toca... el universo de Emma Reyes. - dije, sonriendo.
• Oh no... - dijo Emma a secas, triste. 
• ¿Que capitulo vamos a representar? - dijo Emma Reyes, ilusionada. - La boda de Lucas y Andrea, por favor...
• No... - dije, sonriendo.

Emma Reyes lo entendió.

• De todos los capitulos posibles... ¿Elegiste ese? - dijo la letrada.

Sonrei...

Continua en: Episodios desde Madrid - Edición Especial (Primer "Aniversario")