domingo, 19 de agosto de 2012

Tradiciones G/Cinthianas Parte 5

  • G/Cinthia... - dijo Mario.
  • ¿Dime, mi papi, mi churro, mi riqui, mi rey? - dijo G/Cinthia, de carrerilla.
  • Graciosa... Que el trapo este que me has puesto ya esta caliente. Me esta incomodando. - dijo Mario.
Mario yacía en una cama. G/Cinthia le extrajo el trapo de la cabeza, lo mojo, lo exprimió y se lo volvió a colocar en la frente. La chica se agacho y se dispuso a besarlo en los labios. Mario cerro los ojos y puso morritos, pero G/Cinthia cambio de dirección y le beso la frente.
  • Joder... - dijo Mario. - ¿Hace cuanto que no me das un beso?
  • ¿Hace cuanto que tu no dejas de seducirme, a ver si me abro de piernas?
  • Pero que rencorosas sois las mujeres... Se os queda todo aqui... - dijo Mario, señalandose la cabeza. - Claro, la envidia de pene... Si ya lo dijo Freud...
  • Ustedes la fuerza, Mario... - dijo G/Cinthia, bajandose los pantalones. - Nosotras la inteligencia y el placer de darles cuerda...
  • Ademas, bien que disfrutas. Es de locos negar algo que te gusta. - dijo Mario. Abrió los ojos cuando G/Cinthia se quito los pantalones. - Eres mala...
  • Me siento fatal antes y después de hacerlo. Durante no, ya que alli no soy persona... - dijo la chica. - Bueno, ¿Que tal me veo?
  • Te comeria con mayonesa y ketchup... Y mira que odio el ketchup...
  • Mario, ¿Te acostarias conmigo, asi tuviera SIDA?
  • Claro... si con el pre...
  • Sin preservativo... - dijo la chica y sonrio.
Mario dudo. G/Cinthia empezó a moverse sensualmente. La chica sonrio.
  • ¿Serias capaz de ponerme en ese dilema? Pero como sois las tias... Cuanta razon tiene la persona que dijo que las tias son la perdicion de todo hombre... Ahora entiendo porque los 3 tenores, los 3 mosqueteros y los 12 apostoles nunca dejaron entrar a las mujeres en sus grupos... Mira los Beatles... Llego Yoko Ono y se fueron a la mierda...
  • No conozco a los Beatles...
Mario abrio los ojos.
  • Hemos terminado. - dijo y se intento ponerse en pie.
G/Cinthia estallo en carcajadas. La chica se quito la camiseta. 
  • Creo que el trapo se ha puesto caliente... Otra vez... - dijo el chico.
  • Hagamos esto, Mario. Tu querrás que te cuente otro cuento. - dijo la chica. Se sento en la cama y se acostó al lado de Mario, abrazandolo. - Demuestrame que me quieres por como soy y no por mi físico  Atencion... Si algun lugar X de la sabana se eleva, tu y yo tendremos graves problemas, mi estimado Marito... - dijo G/Cinthia. - ¿Porque me quieres por como soy, verdad? ¿Tu no me quieres por mi físico, verdad? ¿¡Verdad!?
Mario miro a otro lado.
  • Si, mi amor...
  • Asi me gusta. Veamos... - dijo la chica.
Ni corta ni perezosa, G/Cinthia puso una pierna encima, a la altura de la pelvis de Mario.
  • Había una vez, 2 hermanos muy pobres. Estos hermanos estaban bajo la tirania de su abuelo, un viejo decrepito que su unica obsesion era criar un cerdo. Cebarlo lo suficiente para venderlo luego y asi sacar tanto dinero para vivir. El problema era que cebaba al cerdo con basura y obligaba a los pobres hermanitos a buscar entre vertederos algo con lo que saciar la voraz hambre. Conforme pasaba el tiempo, el cerdo iba ganando un volumen terrible. Era inmenso. Lo que significaba que tenia mas hambre. La crueldad del abuelo también parecía crecer con el voluptuoso físico del animal, por lo que cada vez que escuchaba llorar a su "pobre" animal, castiga ferozmente a los hermanos, haciendo que vayan a buscar mas basura para dárselo al cerdo. Un día de esos, el hermano menor enfermo debido a la poca higiene con la que trataba dia a dia. El viejo se enfado, preocupándose mas por el hecho que ahora traerán la mitad de comida para el cerdo que la gravedad de la enfermedad de su nieto. El hermano mayor salio el solo entonces a buscar basura. Los días pasaban y la rutina era la misma: Jugarse su salud en vertederos, mientras examinaba bolsas de basura, esperando encontrar algo en buen estado para llevárselo a la boca. Raramente encontraba una manzana limpia y perfecta. Pero un dia de esos, encontró un pobre perrito abandonado. El hermano mayor lo llevo a casa para alegrarle la estancia a su hermano pequeño, quien se alegro al ver el perrito corretear por su habitación. El abuelo solo escupió al piso cuando vio al animal. Ambos hermanos lo ignoraron y jugaron en sus ratos libres con el chucho, quien parecía la alegría de la casa. Un dia, el hermano menor mejoro y ambos hermanos salieron a busca comida. Los días pasaban y ambos hermanos solo esperaban que terminara el dia para llegar a casa, entregar los cubos con basura a su abuelo y ponerse a jugar con su nueva mascota. Pero un dia, mientras ambos hermanos salieron, el cerdo empezó a chillar de hambre. Tal era el chillido que alerto a los vecinos. El abuelo, desesperado por su "animalito", cometió un error garrafal: Arrojo al pobre perrito a la granja del cerdo. Cuando los hermanos volvieron, preguntaron donde estaba su mascota, puesto que siempre los recibía ladrando. El viejo los llevo a la granja y ambos hermanos pudieron ver unos cuantos huesos esparcidos en el suelo. El hermano mayor estallo en cólera y empujo a su abuelo. El viejo levanto su cayado y los golpeo fuertemente a los hermano, pero en eso, una cascara de plátano, producto de la búsqueda de basura de ese día, hizo perder el equilibrio al viejo. Cayo estrepitosamente y se dio un baño de basura que nadie desearía. El hermano mayor, furioso, cogió el cayado y empezó a golpear al viejo. Se dio cuenta, entonces, que tenían la oportunidad de ser libres. El hermano mayor cogió a su hermano y ambos echaron a correr, cogiendo la poca ropa que tenian. Corrieron y corrieron tanto como pudieron. Cuando estuvieron a salvo, se dieron cuenta que su libertad era parcial, pues ahora tendrían que mendigar en vertederos para poder sobrevivir. Pero lo curioso era lo que oyeron los vecinos. Desde la granja, llegaron sonidos y gritos de una batalla. Como si alguien se defendiera de algo muy grande... y muy hambriento.
G/Cinthia termino el cuento de manera peliculera.
  • Que se joda el empresario, intentando alimentar su capital a costa de sus empleados. - dijo Mario.
G/Cinthia abrió los ojos.
  • No pensé que te ibas a dar cuenta de la metáfora. Tu si ah... - dijo la chica.
  • ¿Acaso crees que no estoy atento a tus cuentos, mi amor? Joder, que cursi... 
  • Me sorprendes... Y me sorprende el hecho que no te hayas... "endurecido" en este tiempo que he estado a tu lado. Enhorabuena, has pasado la prueba. - dijo G/Cinthia.
  • Creo que me merezco un "regalo", ¿no crees? Hay que aprovechar que ya estas... "lista para la ocasión" - dijo Mario, mirándola de pies a cabeza.
G/Cinthia puso un gesto que hacia parecer a las actrices porno unas santas. La chica se acerco, se inclino hacia Mario, poniendo la mano en la pelvis... y rápidamente le dio un beso en los labios. 
  • ¿No decias que hace tiempo que no te daba un beso? Ale, ya tienes tu "regalo". - dijo la chica y comenzo a vestirse.
  • Estupida... - dijo Mario, totalmente desilusionado.
G/Cinthia estallo en carcajadas.

2 comentarios:

  1. Mírate las faltas de ortografía y los errores en los tiempos verbales! JAJaj pero no sé por qué esto me sigue gustando... Me lo leo sin darme cuenta... Las tres primeras frases me enganchan y sigo hasta el final! Ya sabes que me gusta, chaito!

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  2. Le agradezco el comentario pero lo escribí en la madrugada, que es cuando me viene la inspiración. Gracias y la siguiente sera un edición especial, basada en hechos reales (Los personajes digo xD)

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